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España recibirá otras 5.000 vacunas adicionales contra la viruela del mono antes de que acabe el año, con lo que dispondrá de un total de 17.000 para tratar de atajar el brote que ha dejado en nuestro país más de 6.100 casos desde principios de mayo.
Precisamente para afrontar su avance, y en un contexto de escasez de fármacos, la Comisión de Salud Pública estudia este lunes administrar el suero por vía intradérmica y no subcutánea como hasta ahora, que permitirá ampliar la capacidad de vacunación hasta cinco veces con cada dosis actual.
Sin embargo, la Comunidad de Madrid ha decidido no esperar a la decisión de la Comisión y comenzó el pasado viernes a usar porciones más pequeñas, ya que ese día fue cuando este método recibió el aval de la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés) y también de la propia ponencia de vacunas, el órgano técnico que asesora al Ministerio y las comunidades.
Así lo ha indicado el consejero madrileño de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, que ha criticado que la escasez de vacunas ha sido un problema desde el comienzo: «Ahora lo que no podemos es perder ni un solo minuto, ni una sola dosis para continuar administrando y tener esa labor de vigilancia permanente para tratar de llevar el máximo control de la enfermedad, aunque es una situación complicada», ha subrayado.
