Rue20 Español/Rabat
El imán de la Gran Mezquita de Dakar, El Hadj Moussa Samb, destacó, este lunes, la profundidad de las relaciones espirituales seculares entre el Reino de Marruecos y la República de Senegal de las que este lugar de culto, inaugurado en 1964 por el difunto Su Majestad el Rey Hassan II y el primer presidente de Senegal independiente, Leopold Sedar Senghor, «es una perfecta ilustración».
En su sermón con motivo de la oración de Aid Al-Fitr, que marca el final del mes sagrado del Ramadán, cumplida en presencia del Presidente de la República de Senegal, Macky Sall, y del Embajador de SM el Rey en Dakar, Hassan Naciri, y retransmitida por las televisiones locales, el imán recordó la profundidad de las relaciones espirituales seculares entre ambos países.
Señaló que este monumento, que es el orgullo del pueblo de Dakar, es el fruto de la altísima solicitud del difunto Su Majestad el Rey Hassan II, que veló por que esta mezquita reflejara el saber hacer arquitectónico y artístico de los artesanos marroquíes. Esta solicitud es perpetuada por Su Majestad el Rey Mohammed VI, Amir Al-Muminin, quien siempre ha velado por el mantenimiento de esta joya arquitectónica y la renovación periódica de los lugares dedicados a la oración, como lo demuestran las alfombras rabatíes en las salas de oración, dijo el imán.
El imán también subrayó el espíritu de comunión fraternal que caracteriza la presencia marroquí en Senegal y la senegalesa en Marruecos, y que refleja la profundidad de las relaciones espirituales y culturales y los lazos de sangre entre ambos pueblos.
Al término de esta ceremonia religiosa, el embajador de SM el Rey saludó al Jefe de Estado senegalés, Macky Sall, quien le encargó de transmitir a su hermano Su Majestad el Rey Mohammed VI sus saludos fraternales y sus deseos de salud y prosperidad. Map