Rue20 Español/Rabat
Los detenidos de los sucesos de Gdim Izig gozan de todos los derechos que les otorga la ley, contrariamente a las «alegaciones infundadas» contenidas en el comunicado conjunto de Human Right Watch (HRW) y Amnistía Internacional (AI), aseguró, el miércoles, la Delegación General de Administración Penitenciaria y Reinserción (DGAPR).
Los detenidos concernidos, encarcelados en 07 establecimientos penitenciarios, gozan de todos los derechos que les otorga la ley, destacó la DGAPR en una aclaración sobre el comunicado conjunto de Human Right Watch y Amnistía Internacional sobre las condiciones de detención de los detenidos de los sucesos de Gdim Izig.
La misma fuente señala que el comunicado en cuestión es «claramente tendencioso», en la medida en que se limita a reproducir las alegaciones infundadas de las familias de los detenidos en cuestión y puesto que guarda silencio sobre la suerte de las personas que mataron y cuyos cuerpos profanaron, así como sobre la de sus familias, y que obvia el hecho probado de que no son más que asesinos a sueldo del Estado argelino.
La DGAPR precisa que estos detenidos están alojados en celdas con ventilación e iluminación naturales, se benefician de las visitas de sus familiares, de la restauración colectiva proporcionada por empresas privadas, de los baños de agua caliente y de los patios de recreo iluminados, señalando que disponen de televisores en sus celdas que emiten los canales de BeIN Sports, de líneas telefónicas fijas y de la posibilidad de adquirir diversos productos en los comedores de la prisión y pueden recibir productos y alimentos de sus propias familias con ocasión de las fiestas religiosas.
En cuanto a la atención sanitaria, se benefician de ella en el servicio de salud de la prisión y, si es necesario, en establecimientos sanitarios extramuros, según la DGAPR.
Además, estos presos gozan de su pleno derecho a proseguir sus estudios y se benefician de los medios que las administraciones de los centros penitenciarios en cuestión ponen a su disposición para preparar sus exámenes y disertaciones, lo que les permite obtener títulos universitarios en prisión, prosigue la misma fuente, precisando que son tratados dignamente y en igualdad de condiciones que los demás reclusos.
Sin embargo, por razones humanitarias, pueden beneficiarse de otras ventajas, precisa la aclaración, explicando que en cuanto a las visitas familiares, por ejemplo, dado que sus parientes vienen de provincias lejanas a visitarlos, las administraciones de los centros penitenciarios en cuestión les conceden facilidades adicionales en cuanto a la duración y la frecuencia de las visitas, el número de visitantes, etc., recalca la DGAPR.
En lo referente a las pretendidas huelgas de hambre calificadas de «continuas» por el comunicado, aparte de que estos detenidos sólo anuncian realizarlas de vez en cuando, no las cumplen en su totalidad, siendo su único objetivo llamar la atención sobre sus casos, ganarse la simpatía de las ONGs hostiles a Marruecos y engañar así a la opinión pública, agrega la DGAPR.
En lo que atañe al supuesto «aislamiento arbitrario», se trata más bien de celdas individuales en las que se aloja a estos detenidos a petición suya, a sabiendas de que las que ocupan son contiguas, según la misma fuente.
En lo que respecta a las acusaciones de malos tratos y torturas a las que habrían sido sometidos estos detenidos, añade el comunicado, son totalmente infundadas, y emanan directamente de las falsas denuncias que miembros de sus familias difunden a través de diversos medios de comunicación y otros medios y transmiten a sus cómplices en el extranjero como parte de las campañas de desinformación y propaganda, señala la DGAPR.
Igualmente, la DGAPR recalca que las solicitudes de estos detenidos para ser trasladados a prisiones situadas en las provincias del sur del Reino no han sido atendidas debido a la duración de sus condenas, sabiendo que 4 de ellos están encarcelados en centros penitenciarios situados en estas provincias y otros 4 en dos establecimientos situados en una provincia adyacente.
Por otra parte, varios de ellos son trasladados a prisiones de las Provincias del Sur por periodos de tiempo determinados, debido a la avanzada edad y/o al estado de salud de sus allegados, según la DGAPR.
