Rue20 Español/Rabat
«La lucha contra la tortura y el discurso de odio y de extremismo» es el tema de un seminario celebrado el sábado en Guelmim, a iniciativa de la Liga Amazigh de Derechos Humanos.
La reunión, a la que asistieron activistas de derechos humanos, investigadores y actores de la sociedad civil, así como víctimas de la tortura en las cárceles del «polisario» en Tinduf, en territorio argelino, fue una oportunidad para destacar las importantes reformas emprendidas por Marruecos a nivel jurídico e institucional para luchar contra el discurso del odio, la discriminación y el extremismo.
En esta ocasión, el Coordinador Nacional de la Liga Amazigh de Derechos Humanos, Boubker Onghir, explicó que este seminario forma parte de la aplicación de un convenio de asociación, firmado entre la liga y el Ministerio de Justicia.
También indicó que esta reunión permite resaltar los importantes logros alcanzados en el ámbito de los derechos humanos en Marruecos, bajo la dirección ilustrada del Rey Mohammed VI, en los ámbitos de la protección de los derechos humanos y la adaptación de las legislaciones nacionales con las cartas internacionales en este campo.
Este seminario es también una oportunidad para arrojar luz sobre el papel de la sociedad civil en el apoyo a la lucha contra el discurso del odio y el extremismo, y para levantar el velo sobre las exacciones de tortura que sufren los secuestrados en los campamentos de la vergüenza en Tinduf, en flagrante violación de todos los principios y cartas internacionales sobre derechos humanos.
Por su parte, el presidente de la Coalición Saharaui para la Defensa de las Víctimas de la Prisión de Arrachid, Ahmed El Khor, pasó revista a las etapas históricas del conflicto artificial sobre el Sáhara marroquí, así como de la creación del «polisario» y su apoyo e instrumentalización por parte de Argelia.
El Khor, una de las víctimas de la tortura en las cárceles del «polisario», expuso también las prácticas salvajes y los abusos cometidos contra los saharauis secuestrados durante décadas, la represión, los abusos y los maltratos en los campamentos de Tinduf, recordando que pasó 14 años en las cárceles de los separatistas, incluidos 10 años de aislamiento, antes de volver a la Madre Patria.
Por su parte, diversos actores destacaron los logros de Marruecos en materia de derechos humanos y las reformas jurídicas e institucionales emprendidas por el Reino en este ámbito, incluida la creación de la Comisión de Equidad y Reconciliación, que ha sido un modelo a seguir en el mundo.
También hicieron un llamamiento a todas las instituciones políticas, partidistas, civiles y mediáticas a formar un frente unido para hacer frente a las alegaciones y tesis separatistas, y para seguir reforzando los mecanismos de defensa en favor de la causa nacional.
En este encuentro se presentaron testimonios en los que las víctimas de la tortura en las cárceles de Tinduf pusieron al descubierto la represión, las prácticas salvajes y los abusos cometidos contra ellos por los carceleros del «polisario».