Rue20 Español/ Fez
Meryem Ghoua
Merendina inventó otro estilo de celebrar el mes del amor mediante la firma de románticos mensajes en sus empaques.
Un cambio de Look que no gustó a una parte de la sociedad marroquí, mientras que otra vio en ello algo creativo que tiene que ser aplaudido.
Merendina ha sido tema esta semana. Basta con teclear Merendina para ahogarse en un sinfín de opiniones positivos y negativo.
«Te amo», «Te echo de menos», «Tú y yo somos uno», «Eres lo mejor que tengo», «No puedo olvidarte»… etc, todas estas frases son emociones, una muestra del amor puro que Merendina experimentó y el amor nunca ha sido un delito o un crimen.
Tal como se esperaba, este gesto por parte de Merendina ha desatado polémica en Marruecos, con críticas en las redes sociales, algunos incluso llegaron con llamadas al boicot tanto por parte de los comerciantes como los clientes.
«La dignidad del comerciante está por encima de cualquier consideración», dijo un vendedor.
«No está disponible para la venta porque incluye frases que atentan a la moral», reveló otro comerciante.
«Ya no vendo Merendina porque han puesto estas frases, y no puedo vender un producto a un hermano musulmán que tiene este tipo de frases», afirmó.
Por desgracia, hablar en Marruecos a cara descubierta, con nombres y apellidos, sobre el amor o las relaciones amorosas sigue siendo bastante complicado.
Sin embargo, varios jóvenes defendieron este gesto y lo justificaron.
«El mayor fan de Merendina», «los marroquíes que están en contra de Merendina son hipócritas» o «¿desde cuándo el islam prohíbe el sentimiento del amor?» son algunas de las frases de apoyo a la campaña que se pueden leer en las redes.
Para el sociólogo marroquí experto en extremismo Halim Madkuri, esta ola de crítica proviene del sector islamista conservador, que intenta «resistir a cualquier cosa que desafíe sus valores».
Cabe destacar que amar en Marruecos es un poco difícil porque la persona que ama no sólo enfrenta a una única persona,- a quien ama – sino que también debe lidiar con una sociedad culturalmente cargada de tradiciones, ya sean buenas o malas.
