Rue20 Español/Rabat
El embajador del Reino de Marruecos en Brasil, Nabil Adghoghi, ha destacado la creciente importancia de la cooperación marítima entre Marruecos y Brasil, dos naciones con extensas costas atlánticas que comparten una visión común para el desarrollo sostenible y la integración económica en la región.
En un artículo publicado en el sitio web Diplomacia Business, Adghoghi subrayó la posición geográfica estratégica de Marruecos, con acceso tanto al Océano Atlántico como al Mar Mediterráneo, y la ambición del país, impulsada por SM el Rey Mohamed VI, de convertir su fachada atlántica en un centro económico clave y una plataforma de influencia continental.
El diplomático resaltó la sinergia entre ambos países, enfatizando la coincidencia de sus extensas costas —más de 3.000 km para Marruecos y más de 8.000 km para Brasil— y la cooperación en la delimitación de sus zonas económicas exclusivas en 2020, de acuerdo con la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar.
Esta colaboración se extiende a iniciativas estratégicas como la brasileña «ZOPACAS» (Zona de Paz y Cooperación en el Atlántico Sur), que promueve la cooperación entre más de veinte países de ambas orillas del Atlántico, y las ambiciosas iniciativas marroquíes, incluyendo el puerto de Dajla, el gasoducto Nigeria-Marruecos, y la Iniciativa Atlántica Africana, que promueve la integración regional de 23 países africanos atlánticos en áreas como la seguridad, la economía azul, la conectividad y el desarrollo sostenible.
Adghoghi enfatizó que estas iniciativas reflejan una visión compartida para un Atlántico Sur políticamente seguro, económicamente integrado y ambientalmente sostenible.
Esta visión, combinada con lazos históricos y humanos que datan del siglo XIX, una creencia compartida en el multilateralismo e intereses económicos convergentes, impulsa la elevación de la asociación bilateral a un nivel estratégico.
Las relaciones entre ambos países, según el embajador, han experimentado un notable desarrollo desde la visita del Rey Mohammed VI a Brasil en 2004, fortaleciendo la cooperación en áreas como la seguridad alimentaria y los servicios logísticos.
El marco jurídico bilateral también se ha fortalecido con acuerdos en defensa y seguridad, prevención de la doble imposición y cooperación aduanera; además de la cooperación técnica en energías renovables, hidrógeno verde y ciencias marinas.
Finalmente, Adghoghi vislumbra un futuro en el que Marruecos y Brasil lideren una nueva articulación geopolítica del Océano Atlántico, impulsando una innovadora conexión geoeconómica entre ambas orillas.
Esta colaboración, basada en una historia de más de 150 años, abrirá un nuevo capítulo de integración atlántica, aprovechando los múltiples atractivos de la economía azul, la pesca sostenible, la oceanografía y la coordinación en materia de seguridad.
