11 C
Rabat
jueves, diciembre 12, 2024

Marruecos, pieza clave para la transición democrática en Libia

 

Rue20 Español/Rabat

En un contexto de crisis persistente en Libia, Marruecos se afirma como un actor determinante para facilitar la reconciliación entre las diferentes facciones libias.

- Anuncio -

A través de su compromiso diplomático, el Reino no solo ha reconocido la legitimidad de las aspiraciones libias para una transición democrática, sino que también ha jugado un papel de mediador esencial, según una reciente investigación publicada por el Centro Democrático Árabe.

Desde la caída del régimen anterior en 2011, Libia ha nutrido la ambición ardiente de alcanzar una transición democrática, un ideal por el cual el pueblo libio ha consentido enormes sacrificios.

Aunque las élites políticas reconocen la importancia imperiosa de entablar un diálogo constructivo entre las diferentes instituciones y entidades, las injerencias externas continúan representando una de las principales trabas a la concreción de este objetivo.

Varios países han explotado su influencia y posición estratégica para hacer avanzar sus propios intereses en Libia, entre ellos el Reino de Marruecos.

Este último ha sabido distinguirse por un enfoque objetivo, ampliamente reconocido por numerosos observadores, según el estudio titulado «La diplomacia marroquí y su papel en la transición democrática en Libia: entre logros y desafíos«, del investigador Hani Mohamed Miftah Embarek.

- Anuncio -

En efecto, Marruecos es percibido como un actor regional notable que, gracias a sus esfuerzos diplomáticos, ha buscado establecer un clima de acercamiento y reconciliación entre las facciones libias en conflicto, con la esperanza de favorecer la transición democrática tan esperada, precisó la misma fuente.

El estudio ha recordado que desde el inicio de la Revolución del 17 de febrero de 2011, Marruecos ha reafirmado su compromiso con el cambio en Libia, reconociendo la legitimidad del Consejo Nacional de Transición.

El Reino también ha apoyado las resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas para contrarrestar el régimen anterior, al tiempo que ha enfatizado la importancia de mantener la estabilidad interna y de formar un nuevo gobierno libio durante el período de transición.

En este marco, Marruecos ha jugado un papel clave al acoger el diálogo libio, iniciado por la Misión de Apoyo de las Naciones Unidas, que ha movilizado a las fuerzas políticas en la ciudad de Sjirat.

Este proceso ha culminado con la firma del Acuerdo Político de Skhirat el 17 de diciembre de 2015, un acto constitutivo esencial que ha abierto el camino a la creación del Consejo Presidencial y del Gobierno de Unión Nacional, ha subrayado el investigador.

Este acuerdo ha preservado las instituciones soberanas, tales como la Compañía Nacional del Petróleo y el Banco Central Libio, consolidando las bases del sistema político libio durante su fase de transición.

Además, Marruecos se ha propuesto unir a todas las partes en conflicto en torno al diálogo, con el objetivo de reducir las tensiones entre las diferentes facciones libias.

A partir del 7 de septiembre de 2020, Bouznika ha sido el marco de discusiones que han reunido a diputados de la Cámara de Representantes de Tobruk y del Alto Consejo de Estado de Trípoli.

- Anuncio -

Estas conversaciones han permitido alcanzar un consenso sobre cuestiones cruciales, como el cese de las hostilidades, la retirada de las tropas extranjeras y la reorganización de las instituciones del Estado, incluyendo la consolidación de la institución militar, basándose en los resultados de la Conferencia de Berlín de enero de 2020.

Los esfuerzos diplomáticos marroquíes se han proseguido en favor de la reconciliación entre las dos principales instituciones legislativas libias, ha indicado el autor.

El 21 de octubre de 2022, el Reino ha facilitado un encuentro entre Aguila Salah, presidente de la Cámara de Representantes libia, y Khaled al-Michri, presidente del Alto Consejo de Estado, con el fin de discutir la implementación de los resultados de las negociaciones de Bouznika y la unificación de la autoridad ejecutiva, incluyendo la base constitucional necesaria para las elecciones presidenciales y parlamentarias postergadas y los siete puestos soberanos.

Esta reunión ha sido saludada por los miembros del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, quienes han visto en ella un avance significativo hacia un acercamiento de los puntos de vista de las partes libias.

El 23 de mayo de 2023, Bouznika también ha sido el lugar de una reunión de la comisión conjunta formada por representantes del Parlamento y del Alto Consejo de Estado libio, encargada de redactar la constitución y las leyes electorales.

Esta asamblea, clausurada el 7 de junio, ha permitido anunciar un consenso sobre las leyes reglamentarias para las elecciones presidenciales y parlamentarias venideras.

Según el investigador, aunque la diplomacia marroquí ha adoptado un enfoque de neutralidad positiva, con el objetivo de instaurar la confianza entre los actores libios y la comunidad internacional para apoyar el proceso político bajo la égida de las Naciones Unidas, ha enfrentado obstáculos importantes. Por un lado, las intervenciones internacionales y regionales han intensificado la complejidad de la situación.

Por otro lado, Marruecos ha encontrado limitaciones en su papel de mediador después del Acuerdo de Sjirat, temiendo comprometer su posición de no intervención en los asuntos internos.

Mira nuestro otro contenido

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Anuncio

VIDEOS

Entradas populares

CONTINÚA LEYENDO