Rue20 Español/Rabat
Entrevistado por Ismail El Khouaja
En un momento crucial para la política exterior marroquí, marcado por el 49.º aniversario de la Marcha Verde y el reciente Discurso de Su Majestad el Rey Mohammed VI, las reflexiones de los expertos en política exterior cobran especial relevancia para comprender las implicaciones y el alcance de este histórico pronunciamiento real.
En una entrevista recién concedida a Rue20 Español, Mohamed Benabdelkader*, exministro de Justicia y destacada figura de la Unión Socialista de Fuerzas Populares (USFP), comparte su análisis detallado sobre el trascendental Discurso Real.
Con una dilatada trayectoria que incluye roles clave en el Gobierno marroquí, incluyendo su gestión como ministro delegado encargado de la Reforma de la Administración y la Función Pública (2017-2019), Benabdelkader aporta una visión privilegiada sobre las implicaciones diplomáticas y estratégicas del Mensaje Real.
La primera parte de la entrevista profundiza en tres aspectos fundamentales: el contenido y significado del Discurso Real, los mensajes implícitos dirigidos tanto a Argelia como a Polisario, y las potenciales repercusiones del retorno de Donald Trump a la presidencia estadounidense en relación con el expediente del Sáhara marroquí. Como experto en relaciones internacionales y poseedor de un máster en estudios diplomáticos de la Facultad de Derecho de Rabat, Benabdelkader ofrece un análisis minucioso que ayuda a comprender mejor la posición estratégica de Marruecos en el actual contexto geopolítico.
— Marruecos ha celebrado estos días el 49 aniversario de la gloriosa ‘Marcha Verde’, una ocasión para que SM el Rey Mohamed VI dirigiera un discurso a su Nación; en primer lugar ¿Cómo analiza el contenido del discurso Real?
Como todos los discursos de Su Majestad, un discurso unificador, movilizador, con un balance de logros, una agenda reformista y una perspectiva de futuro.
Es un discurso unificador por el mensaje de unidad nacional que transmite, dirigiéndose a todos los componentes de la Nación: “Querido pueblo […] nuestros hijos en el Sáhara […] nuestros hijos en el extranjero. […] el gobierno […] todos los ciudadanos en todas las regiones” así independientemente de sus diferentes pertenencias geográficas o posiciones sociales.
Es también un discurso movilizador porque incita a las fuerzas vivas de la sociedad marroquí a una participación activa en la defensa de los intereses supremos de la nación, “La etapa que atraviesa la cuestión de nuestra unidad territorial requiere el mantenimiento de esfuerzos concertados de todos […] la movilización de las competencias marroquíes residentes en el extranjero […] Los sacrificios consentidos por la generación de la Marcha Verde nos incitan a adoptar una mayor movilización y vigilancia”.
Es además un discurso con un balance de logros: “Apego de nuestros hijos en el Sáhara a su marroquinidad […] progreso renaciente, la seguridad y la estabilidad de los que goza el Sáhara marroquí […] creciente reconocimiento internacional que se granjea la marroquinidad del Sáhara”.
Al mismo tiempo un discurso con una agenda reformista: “Hemos decidido llevar a cabo un nuevo cambio en el ámbito de la gestión de los asuntos de la comunidad marroquí en el extranjero”.
Más importante aún, es un discurso con perspectiva de futuro: “Ya es hora para que las Naciones Unidas asuman su responsabilidad y aclaren la gran diferencia existente entre el mundo real y legal que Marruecos representan en su Sáhara, y entre un mundo petrificado, alejado de la realidad y de sus evoluciones.”
Quisiera añadir que el Discurso Real contiene dos grandes ejes: la llamada a una resolución definitiva del conflicto artificial sobre el Sahara marroquí, y el anuncio de una reforma de los órganos a cargo de los Marroquíes Residentes en el Extranjero (MRE), basada en una nueva arquitectura institucional, dos temas que se enmarcan perfectamente en la visión estratégica y proactiva de Su Majestad el Rey.
—¿Cómo interpreta usted el mensaje que ha dirigido SM implícitamente tanto a Argelia como a Polisario?
Debo señalar que los discursos Reales además de ser inspirantes, realistas, elocuentes y concisos, son discursos que SM vela por que sean mesurados, serios y respetuosos, además de que promuevan una comunicación constructiva, impactante y que no carece de figuras retóricas cada vez que sea necesario, como se destaca en este discurso que utiliza la “enunciación implícita”, una técnica discursiva de enviar un mensaje a alguien sin nombrarlo. Este enfoque permite transmitir un mensaje evitando referirse directamente al destinatario, ya sea describiendo características o acciones específicas que se pueden vincular con el destinatario previsto, como es el caso de aquellos que “aprovechan la cuestión del Sáhara para lograr una salida al Océano Atlántico”. O reemplazando el nombre del destinatario con un pronombre demostrativo “A estos decimos…” que le permite hablar de él sin nombrarlo.
En este sentido, podemos decir respecto al mensaje claro y directo, que SM emitió en su discurso a Argelia, que aunque SM no la mencionó por su nombre, las alusiones eran claras y directas, especialmente cuando denunció aquellas prácticas paradójicas de “quienes siguen exigiendo un referéndum de autodeterminación, a pesar de haber sido abandonado por Naciones Unidas, al mismo tiempo que se niegan a permitir un censo de los retenidos en los campamentos de Tinduf, tomándolos como rehenes en lamentables condiciones”, y cuando desveló las verdaderas intenciones de los que “aprovechan la cuestión del Sáhara para lograr una salida al Océano Atlántico”.
El mensaje dirigido a Argelia, sin mencionarla, consiste en formular desde el más alto nivel del Estado marroquí, una respuesta positiva a esta salida deseada al Atlántico “no vemos ninguna objeción en ello” dice SM tendiendo así la mano de nuevo a Argelia con un mensaje fuerte que constituye una evolución del Discurso Real ilustrando el deseo de promover una solución integral e inclusiva que integra en las consideraciones de soberanía marroquí, perspectivas de cooperación regional en las cuales Marruecos está dispuesto a trabajar de consuno por un futuro común basado en el desarrollo y la paz.
—El discurso de SM el Rey coincidió con la victoria del presidente Trump que reconoció la marroquinidad del Sáhara al final de su anterior mandado. ¿Qué repercusiones va a tener esta victoria sobre las relaciones con Marruecos, principalmente en el expediente del Sáhara?
El regreso a la Casa Blanca del presidente que reconoció la soberanía de Marruecos sobre el Sáhara, es sin duda un acontecimiento de mucha relevancia para la dinámica de este expediente. Cabe recordar que el histórico reconocimiento por parte de Trump, en su momento como presidente de Estados Unidos, de la soberanía marroquí sobre las provincias saharianas, constituyó un punto de inflexión fundamental en el expediente, pero la esperanza de traducirlo en pasos prácticos se desvaneció rápidamente después de la llegada de la administración Biden, que, aunque mantuvo la decisión de reconocimiento, no tomó medidas prácticas para hacer realidad esta decisión.
Hoy, tras el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca, podemos prever que Washington seguirá adelante con la consolidación de la resolución que el presidente republicano firmó en las últimas semanas de su mandato. En este contexto, la portavoz del Partido Republicano declaró a France 24 que la cuestión del Sáhara Occidental constituye un expediente importante para la administración Trump porque forma parte de su metodología basada en establecer la paz y evitar crear otros conflictos en la región. La misma fuente explicó que Trump busca nombrar un delegado especial para la región norteafricana, similar a otras regiones del mundo, y se espera que el expediente del Sáhara Occidental reciba especial atención.
Con la victoria electoral de Trump, podemos esperar un fortalecimiento de las relaciones bilaterales entre Estados Unidos y Marruecos, mediante el apoyo a proyectos de desarrollo y la apertura de un consulado en las provincias del sur.
Cabe destacar que la segunda parte de la entrevista se publicará más tarde.
*Mohamed Benabdelkader es exministro de Justicia del Reino de Marruecos y destacada figura de la Unión Socialista de Fuerzas Populares (USFP).
