Rue20 Español/ Rabat
En un contexto donde la política internacional y la diplomacia juegan un rol capital, es fundamental observar los acontecimientos en Venezuela desde una perspectiva marroquí. Este país, conocido por su hostilidad hacia la integridad territorial de Marruecos, se encuentra en un momento decisivo de su historia política. La reciente entrevista concedida por María Corina Machado, líder opositora venezolana, al diario español El País, ofrece una perspectiva profunda a las posibles transformaciones que se avecinan.
María Corina Machado, una figura central en la oposición venezolana, ha sido un pilar en la lucha contra el chavismo. A pesar de estar vetada como candidata, su influencia sigue siendo significativa. En una campaña presidencial inusual, Machado ha delegado su candidatura a Edmundo González Urrutia, quien, gracias a su apoyo, ha ganado popularidad y lidera en las encuestas, según datos confiables que muestran una diferencia abrumadora sobre Nicolás Maduro.
La situación en Venezuela presenta un escenario complejo, especialmente considerando la historia de hostilidad del gobierno venezolano hacia la integridad territorial de Marruecos. Las declaraciones de Machado sobre la transición pacífica y la necesidad de negociar son particularmente relevantes en este contexto. Ella insiste en que «los votos tienen que contarse» y que la participación ciudadana será masiva a pesar de los obstáculos impuestos por el régimen chavista.
La política internacional juega un rol crucial en este proceso. La aceptación de los resultados por parte de Maduro es vital para la estabilidad de Venezuela y, por ende, para la región. Machado subraya la importancia de una transición pacífica y menciona que tanto ella como González están dispuestos a negociar para asegurar una gobernabilidad sostenible: «Estamos dispuestos a avanzar en un proceso de negociación real para hacer una transición pacífica».
El gobierno de Marruecos ha observado de cerca estos desarrollos, reconociendo que cualquier cambio en el liderazgo venezolano podría influir en las relaciones diplomáticas bilaterales. Una transición pacífica en Venezuela podría abrir nuevas oportunidades para la diplomacia marroquí, permitiendo la posibilidad de mejorar las relaciones con un nuevo gobierno que podría ser más receptivo a los intereses de Marruecos.
Además, la postura de las Fuerzas Armadas venezolanas es un factor determinante. Machado afirma tener contactos significativos dentro del ejército, indicando que hay facciones dispuestas a un cambio. «Ellos también tienen hijos y hermanos, son testigos del saqueo del país y la afectación de derechos humanos», señala, indicando que este apoyo militar es decisivo para evitar un conflicto armado y asegurar una transición pacífica. La unidad del país, según Machado, se ha fortalecido, y la narrativa del enemigo interno se ha desmantelado: «Aquí no hay enemigo. El país está unido como nunca antes».
Maduro, al abrirse a negociar con la Casa Blanca a pocas semanas de las elecciones, parece estar reconociendo la inevitabilidad del cambio. Las estrategias de violencia y represión no han logrado disuadir a la población, que sigue buscando un cambio profundo. La comunidad internacional, incluyendo Marruecos, observa con interés este proceso, esperando que prevalezca la razón y se respete la voluntad del pueblo venezolano.
En caso de una victoria opositora, se habla de un gobierno de concertación que incluya sectores chavistas. Esto podría ser una estrategia efectiva para asegurar una transición pacífica y la gobernabilidad futura. La construcción de confianza y la instauración de pilares éticos y liberales son vistos como pasos fundamentales en este proceso. «Para mí, lo más importante es cómo recuperamos la confianza. Esto es una tarea de todos», destaca Machado.
Desde una perspectiva marroquí, es evidente que los desarrollos en Venezuela podrían tener implicaciones significativas para la región y para las relaciones internacionales. La transición pacífica y la estabilización de Venezuela no solo beneficiarían a su población, sino que también podrían abrir nuevas formas de cooperación y entendimiento entre Marruecos y un potencial nuevo gobierno venezolano.
La entrevista con María Corina Machado nos recuerda la importancia de la diplomacia, la negociación y la voluntad popular en la construcción de una sociedad más justa y democrática. En estos tiempos de cambios y desafíos, Marruecos sigue firme en su compromiso de apoyar la estabilidad y el desarrollo en la región, esperando que Venezuela encuentre un camino hacia la paz y la prosperidad.
