Rue20 Español/ Rabat
La postura de los eurodiputados franceses durante la discusión y la votación de la última resolución del Parlamento Europeo sobre la libertad de prensa y de expresión en Marruecos, no refleja la relación histórica entre ambos países.
La pasividad de los partidos políticos franceses y del Gobierno francés ante la nueva resolución demuestran que algo no funciona bien entre ambos países. La crisis silenciosa es una realidad franco-marroquí, aunque Francia la niega.
«No hay crisis con Marruecos», subrayó la portavoz del Ministerio francés de Exteriores en una conferencia de prensa al ser preguntada por los reproches del principal partido político marroquí a Francia por estar supuestamente organizando una campaña contra Marruecos en las instituciones comunitarias, según escribió EFE.
Hay «una relación excepcional» entre los dos países, dijo la misma fuente. La portavoz de echo mano la reciente visita de la jefa de la diplomacia francesa, Catherine Colonna, a Rabat en diciembre, donde se sentaron las bases para proyectar esa relación en los 10 a 20 próximos años para justificar sus palabras.
También habló precisamente de la Resolución del PE. «El Parlamento Europeo -puntualizó- ejerce sus prerrogativas de forma independiente y Francia por su parte tiene una relación de amistad profunda con Marruecos dentro de la cual aborda todas las cuestiones, incluida la de los derechos humanos», aclaró la portavoz.
