Rue20 Español/ Rabat
El presidente del Perú, Pedro Castillo, metió a su ministro de Exteriores, César Landa Arroyo, en un lío muy gordo. Landa podría ser el primero en pagar los platos rotos de las decisiones inapropiadas e incomprensibles de su presidente a nivel de la política exterior.
El pasado mes de septiembre, Castillo empujó a su ex ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Rodríguez Mackay, a la renuncia a su cargo para ‘refichar’ a Landa.
Mackay había sustituido a Landa en agosto con el objetivo de enderezar la política exterior. La ruptura de las relaciones diplomáticas con el Polisario fue la primera decisión de Mackay. Pero un mes después, Landa volvió a restablecer las relaciones diplomáticas con el Polisario.
El acercamiento con Polisario es un de muchos errores garrafales de Castillo y su canciller a nivel de la política exterior. Sin embargo, el Congreso se dio cuenta y reacciona para evitar lo peor.
El canciller de la República, César Landa Arroyo, deberá concurrir al Pleno del Congreso, el viernes 21 de octubre, para responder un pliego interpelatorio de 31 preguntas.
Así lo anunció el presidente del Congreso, José Williams Zapata, luego de que la Representación Nacional admitiera la Moción de Orden del Día nro. 4197 que propone interpelarlo para que responda por las declaraciones del mandatario Pedro Castillo en la 77.° sesión de la Asamblea General de las Naciones Unidas, realizada en Nueva York, las cuales habría debilitado las relaciones del Perú con países del orbe como Rusia, Israel, Reino Unido y Marruecos, según un comunicado del Congreso Peruano.
También se puso a votación la propuesta, hecha por el titular del Parlamento, para que el canciller de la República se presente ante el Pleno el 21 de octubre, a las 16:00 horas. Fue aprobada por 65 votos, 44 en contra y una abstención
El comunicado fue muy claro: «en su discurso en esa reunión internacional debilitó las relaciones de nuestro país con los Estados de Rusia, Israel, el Reino Unido y Marruecos».
«También sobre el anuncio del restablecimiento de la República Árabe Saharahui Democrática, sin tomar en cuenta la política exterior del Perú en las últimas tres décadas, en la medida de que no se trata de un Estado reconocido por la ONU», afirmó.
