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Ismail El Khouaja
Los guiños de los ministros españoles hacia Marruecos continúan, esta vez vienen a través del ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, quien calificó, hoy jueves, las relaciones de Marruecos con España de «buenas».
Sin embargo, el ministro expresó su sorpresa por ausencia de la hasta ahora llamada a consultas, la embajadora Karima Benyaich, a raíz de la entrada en España secreta de un criminal de guerra, Brahim Gali, sin previo aviso a Marruecos.
Las relaciones «en este momento son buenas y funcionan», sin embargo, la ausencia de la embajadora marroquí «sorprende un poco en este contexto», dijo el ministro en una entrevista a Cope.
Sin embargo, el ministro no expresó cómo funcionan estas relaciones que desde hace más de siete meses siguen estancadas, y que desde 18 de mayo solo dos contactos había conseguido España con Marruecos.
El primero, 21 de septiembre, cuando José Manuel Albares anunció que había telefoneado a su homólogo marroquí, Nasser Bourita. Y el segundo, 28 de noviembre, cuando el marroquí excusó no asistir al foro Unión por el Mediterráneo (UpM) para asistir a la cumbre Chino Africana.
Tampoco la ausencia de la embajadora tendría que sorprender. Los dos países están en crisis diplomática y mientras España adopta una postura hostil respecto al expediente del Sáhara marroquí, Marruecos no dará un paso adelante.
Planas agregó asimismo que los dos vecinos aspiran a tener una relación «buena e intensa» de cara al futuro.
Sobre la última decisión del Tribunal General de la Unión Europea, que dice anular los acuerdos pesquero y agrícola entre Marruecos y la UE, Planas limitó a a afirmar que los pesqueros españoles faenan con «absoluta normalidad».
