Rue20 en español/ Fez
Meryem Ghoua
Marruecos es conocido por su generosidad y hospitalidad. La amabilidad de su gente a veces deja sin palabras a los extranjeros que vienen de todos los rincones del mundo para disfrutar de las bellezas de sus ciudades imperiales, de su desierto, de sus montañas y de sus emblemáticos pueblos.
Mohamed Elmakki es un pastor en la región de Tinghir, cuyo comportamiento espontáneo y normal le ha permitido ganar el corazón del pueblo marroquí. De hecho, muchos lo consideraron una estrella indiscutible de las redes sociales esta semana.
En términos espontáneos, Mohamed Elmakki o Moha como lo llama pueblo del sureste, ha sido capaz de promover el turismo para su país durante un tiempo en que necesitamos recuperar este sector vital.
Cuando Moha salió de compras como de costumbre con su burro le sorprendieron dos turistas francesas que lo llamaban y le pedían un trozo de pan diciendo: «¿Tienes pan? Moha respondió espontáneamente con un sí y les dio el pan.
Las dos chicas francesas preguntaron por el precio y entonces Moha dijo una frase simple pero conlleva muchos significados «Somos gente que no vende el pan».
«Me dio dinero y le dije que no es la primera vez que hago esto, esto lo hacemos nosotros por Allah y sin esperar nada a cambio», reveló Moha a nuestro diario «Rue20».
«Nosotros no vendemos el pan», es una frase que llevó este modesto pastor a la fama en las redes sociales, ya que transmitió sin darse cuenta una imagen honorable del pueblo marroquí simple, que siempre ayuda a los demás.
Moha con su generosidad, su sonrisa y su amabilidad logró conquistar los corazones de todos los marroquíes. Pintó durante su encuentro con las turistas un bonito cuadro de nuestro país, en el cual refleja la bondad de Marruecos.
En fin, Marruecos es un país que siempre ha sido conocido por la generosidad de su gente, su buen humor y buen comportamiento con los demás.