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Ismail El Khouaja
En dos décadas, Marruecos se ha convertido en una base de producción automóvil mundial.
La estrategia industrial, bajo el auspicio del rey Mohamed VI, ha propiciado el surgimiento de infraestructuras y ecosistemas eficientes, modernos y sostenibles.
De este modo, Marruecos se convirtió en imán para los gigantes inversores del sector en el mundo.
Incluso llegó a convencer a empresas internacionales a abastecer en Marruecos tal como la gigante marca estadounidense de automóviles eléctricos del multimillonario Elon Musk, Tesla Motors.
Hoy Hyundai ha seguido los pasos del alemán Volkswagen decidiendo dejar a Argelia y apostar por Marruecos en materia de comercialización del sector.
El grupo sur-coreano ha tomado esta decisión a raíz de la “incertidumbre que concierne actualmente sobre el sector automóvil en el país”, informa Europa24.
La estabilidad, así como el desarrollo del sector automóvil en el Reino de Marruecos en los 7 últimos, años que llegó a competir con los gigantes del mundo, son factores que han dejado a Hyundai darse este giro.
“Este paso de Hyundai Motors Company para retirarse del mercado argelino le permitirá enfocarse en mercados internacionales que son mucho más estables desde el punto de vista regulatorio y mucho más prometedores en términos de salidas comerciales, especialmente en Marruecos”, dice la misma fuente.
No cabe olvidar que Marruecos es el primer productor de automóvil en el continente africano. El sector ha alcanzado una madurez tecnológica que le permite atraer a las grandes empresas internacionales.
El ministro de Industria, Comercio y Economía Verde y Digital, Moulay Hafid Elalamy, destacó, el pasado mayo, la capacidad de Marruecos para producir vehículos de alta calidad, con una tasa de integración del 60%.
Todo esto apunta a una revolución en el sector en el Reino que cambiará la faceta económica del país de cara al futuro.
