Rue20 en español/Rabat
La chef marroquí, Najat Kaanache, recibió influencias de las sencillas elaboraciones de la cocina vasca y de las aromáticas preparaciones de la cocina marroquí.
Su madre fue una fuente de inspiración para ella, así como también los grandes chefs como René Redzepi y Ferran Adrià.
Najat es ahora conocida por su apodo “la cocinera itinerante”, puesto que la cocinera emprendió una serie de viajes a países como Países Bajos, Estados Unidos, etc. lo que supuso un enriquecimiento que se refleja en sus platos.
La cocinera marroquí se enamoró de la ciudad espiritual de Fez, por su internacional gastronomía y por el misterio que ejerce esta emblemática ciudad en los turistas. Para ello, decidió abrir uno de sus fogones en los ondulados callejones de Fez.
«Al final he tenido que venir a Fez, un lugar donde todo lo imposible es posible. Con un burrito se puede meter todo lo que se necesita en el restaurante”, afirmó Najat.
La cocinera ahora tiene 34 años y se está preparando para inaugurar un restaurante “Nur” que construyó en 2016 en Fez, pero a causa de la pandemia no consiguió abrirlo y lo mantuvo cerrado.
Los antepasados de Najat provienen de Taza, una zona enclavada entre las montañas del Rif y el Atlas Medio. Allí se encuentran los orígenes de su historia, la que gesta a partir de escabeches, ahumados, encurtidos o fermentaciones.
El fundamento de su cocina sabe a naturaleza, ya que Najat siempre opta por la simplicidad en la preparación de sus platos.
Najat habló, en una entrevista a Tamuda Bay, de Marruecos, de su agricultura que crece con una fuerza impresionante, de su increíble riqueza y dijo que el mejor pueblo del mundo es el pueblo marroquí.
Así, Najat Kaanache, entre plato y plato, se le acumulan los proyectos y los sueños que quedan por cumplir; el sueño de abrir sucursal en Rabat, el de publicar su segundo libro y escribir el tercero y el de protagonizar dos documentales.