Rue20 Español/ Rabat
El ministro de Exteriores de Marruecos, Nasser Bourita, ha subrayado este jueves en declaraciones a la prensa en Barcelona, donde ha mantenido una reunión de trabajo con su homólogo español, José Manuel Albares, que lo ocurrido (la muerte de inmigrantes) el 24 de junio en la frontera de la ciudad ocupada de Melilla «no fueron sucesos normales en su origen y en su procedimiento».
Bourita ha explicado que no se trató de «movimientos espontáneos» sino que «fue algo muy violento, algo muy nuevo» frente a lo que Marruecos respondió «de manera responsable» y con la intención de «no dar ningún incentivo a las redes de tráfico de seres humanos».
Ha recordado también que el Consejo Nacional de Derechos Humanos de Marruecos ha llevado a cabo una investigación y ha remitido un informe al Gobierno.
«Estudiamos el informe y hay lecciones que aprender… Debemos entender cómo y por qué ocurren y si hay lecciones que extraer deben extraerse«, ha añadido Bourita, según Europa Press.
En el mismo contexto, el jefe de la diplomacia marroquí ha destacado que Marruecos y España están ofreciendo un «ejemplo de éxito» en materia migratoria.
«Esta es la única historia de éxito de cooperación en la lucha contra la migración ilegal en la región mediterránea», ha subrayado, señalando que ambos son países «responsables» que apuestan por la migración legal, «protegiendo a los migrantes legales pero luchando contra las redes de tráfico».
Por su parte, el jefe de la diplomacia española, José Manuel Albares, ha destacado la cooperación migratoria entre los dos países, señalando que desde la declaración conjunta suscrita el 7 de abril durante la visita del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, a Rabat, la inmigración se ha reducido en un 20%.
