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Ikrame El Haouari
En una entrevista con medios locales, el presidente Argelino, Abdelmadjid Tebboune, eludió responder al llamado del rey Mohammed VI para activar el diálogo entre los dos países vecinos para desarrollar la asociación bilateral y abrir las fronteras cerradas desde más de tres décadas.
Ante estas declaraciones, Argelia se había mantenido en mutis.
En su respuesta a una pregunta sobre el contenido de la invitación real con motivo del Día del Trono, el presidente Tebboune dijo: “Con respecto a Argelia, no hubo respuesta al problema actual que representa la declaración de un diplomático Marroquí sobre asuntos muy graves, tras la que retiramos a nuestro embajador en Rabat, pero no nos respondieron ”.
En julio, Omar Hilale expresó su apoyo a la autodeterminación del pueblo cabileño en el norte de Argelia, esto es en respuesta a las provocaciones del vecino oriental en cuanto a su apoyo al grupo armado separatista Frente Polisario.
La declaración enfureció a Argelia, que llamó a su embajador en Rabat y amenazó a Marruecos con una mayor escalada de hostilidades.
Aunque el Rey Mohamed VI subrayó que las causas que indujeron al cierre de las fronteras entre Marruecos y Argelia “ya han sido superadas y ahora no tienen ninguna justificación aceptable”.
A pesar de los aplausos que recibió la iniciativa real a nivel local e internacional por su oferta de diálogo, Argelia sigue siendo reacia a resolver el estancamiento político.
Respecto al conflicto del Sahara Marroquí, el presidente Tebboune renovó las posturas hostiles de su país hacia la integridad territorial del Reino de Marruecos.
Tebboune agregó que “ellos pueden resolver el problema, y estamos listos para recibirlos en Argelia si Marruecos y el Frente Polisario quieren reunirse. Son bienvenidos y esperamos resolver este conflicto”, y expresó que “deben resolver ellos mismos sus problemas, y nosotros haremos lo imposible para lograrlo”. Además, destacó que “no se impondrá nada al Polisario”.
Moussaoui Ajlaoui, profesor de investigación del Centro de Estudios Africanos , cree que el presidente Argelino cayó en claras contradicciones durante su respuesta a la invitación real, y señaló que la respuesta de Tebboune sobre la adopción de negociaciones entre Marruecos y el Polisario apoya indirectamente lo que estaba siendo declarado en el memorando de Omar Hilal.
«Argelia se obstina en rechazar la reconciliación con Marruecos, ya que parece claro que la mano tendida por el Reino no sirve la estrategia argelina para la que Marruecos debe conservar este papel de espantapájaros y eterno enemigo», afirma el politólogo Mustapha Tossa.
