Rue20 Español/ Fez
Hace ya algunos años que Marruecos va haciéndose un hueco en el difícil y restringido mundo de la industria aeronáutica.
The Wall Street Journal habló, en un informe, de la transformación de Marruecos a una plataforma para la fabricación de drones, en cooperación con Israel.
Si todavía el Reino no posee cadena de montaje final de aviones, la producción de componentes y contratación conoce un tal auge que se puede decir que en cada avión comercial que sale actualmente de las cadenas en el mundo hay por lo menos un elemento fabricado en Marruecos.
Todas las actividades de la industria aeronáutica marroquí se limitaban al sector comercial civil hasta que, recientemente, la nueva política industrial del gobierno expresara su voluntad de desarrollar la industria militar, logrando buenos resultados.
Buen ejemplo de ello es el reciente acuerdo de cooperación en materia de seguridad firmado entre Marruecos e Israel, que estipula, entre otras cosas, la construcción en Marruecos de dos fábricas de drones, según informó The Wall Street Journal.
Este efecto es el resultado de meses de negociación entre Marruecos y el constructor de drones Bluebird Aerosytems, filial del gigante israelí IAI (Israel Aerospace Industries) cuyo presidente del consejo no es otro que el ex-ministro de defensa Amir Peretz.
Marruecos ha ultimado recientemente la compra de 150 drones de la misma empresa, y, según Shephard Media, Marruecos intenta diversificar sus compras de material militar como lo demuestran las recientes adquisiciones de los drones turcos Bayraktar TB2 y el acuerdo entre Marruecos e Israel sobre la compra del sistema de defensa anti-dron israelí Skylock Dome y el misil indo-israelí superficie-aire Barak 8 capaz de destruir cualquier amenaza aérea.
