Rue20 Español/Rabat
La familia de la resistencia y del ejército de liberación de la región de Gulmim-Ued Nun denunció el «acto hostil» del presidente tunecino, tras la recepción reservada al líder de los separatistas en Túnez, en el marco de la 8ª Conferencia Internacional de Tokio sobre el Desarrollo de África (TICAD 8).
Siguiendo el ejemplo de los diferentes componentes de la sociedad marroquí, la familia de la resistencia condena enérgicamente esta actitud «sin precedentes» del presidente tunecino hacia el pueblo marroquí y su integridad territorial, y denuncia este comportamiento provocador que hiere los sentimientos de todos los marroquíes, indicó, en un comunicado, la delegación provincial del Alto Comisionado para los Antiguos Combatientes de la Resistencia y los Antiguos Miembros del Ejército de Liberación en Tan-Tan.
Por su parte, la delegación provincial del Alto Comisionado para los Antiguos Combatientes de la Resistencia y los Antiguos Miembros del Ejército de Liberación en Sidi Ifni subrayó que la familia de la resistencia en la provincia expresa su firme condena de este «acto hostil y unilateral del presidente tunecino, que ha colocado así a su país en el grupo de los partidarios del separatismo y del terrorismo en el Magreb», recordando las posiciones históricas del Reino, especialmente el levantamiento de los habitantes de Casablanca (7 y 8 de diciembre de 1952) contra el ocupante francés, tras el asesinato del líder sindicalista Farhat Hachad (5 de diciembre de 1952).
Por su lado, la delegación provincial del Alto Comisionado para los antiguos combatientes de la resistencia y los antiguos miembros del ejército de liberación en Assa-Zag expresó su «rechazo categórico a cualquier forma de ataque a la sacralidad nacional», subrayando que este nuevo alineamiento de la presidencia tunecina con los adversarios de la integridad territorial del Reino constituye «un acto peligroso y sin precedentes», que perjudica profundamente los sentimientos del pueblo marroquí y daña las sólidas relaciones que siempre han unido a los pueblos marroquí y tunecino.