Rue20 Español/Rabat
El embajador de China en Marruecos, Li Changlin, reiteró, este jueves en Rabat, la posición de su país que critica la visita a Taiwán de la presidenta de la Cámara de Representantes estadounidense, Nancy Pelosi, calificando este viaje como un hecho «grave» que «viola el principio de una sola China».
En una rueda de prensa celebrada en la embajada de China, Li precisó que esta polémica visita es un acto que «traiciona los compromisos de Estados Unidos con China».
El diplomático chino citó, con este motivo, las medidas adoptadas por Pekín como reacción a esta visita, entre ellas «las sanciones contra la señora Pelosi y sus familiares», «la realización de ejercicios militares transparentes» cerca de Taiwán y «la cancelación de proyectos bilaterales de cooperación».
«No tenemos más remedio que defender nuestra soberanía, nuestra integridad, y decimos que el principio de no injerencia en los asuntos de los Estados soberanos no puede ser ignorado ni abandonado, de lo contrario el mundo volverá a la ley de la selva», dijo.
«El principio de una sola China es objeto de un consenso de la comunidad internacional y es también una norma fundamental que rige las relaciones entre China y los países extranjeros», explicó, señalando que «hasta ahora, hemos contado 181 países con los que hemos establecido relaciones diplomáticas siguiendo el principio de una sola China».
El embajador chino aprovechó esta ocasión para congratularse de la «excelencia» de las relaciones entre Rabat y Pekín, agradeciendo a Marruecos su «apoyo constante a todas las cuestiones de interés vital para China».
Recordó, en este contexto, la votación de Marruecos en 1971 a favor del regreso de China a las Naciones Unidas.
Nancy Pelosi es la primera alta responsable estadounidense que visita Taiwán desde la visita a la isla en 1997 del entonces Presidente de la Cámara de Representantes, Newt Gingrich.
Tras la visita de Pelosi, el Secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, había reiterado en una rueda de prensa que «nada ha cambiado con respecto a la política estadounidense de una sola China».
«No apoyamos la independencia de Taiwán», precisó el jefe de la diplomacia estadounidense.
