Rue20 Español/ Fez
Marruecos inauguró el primer tren de alta velocidad (TGV) de África en noviembre de 2018.
TGV es fruto de una colaboración entre la Oficina Nacional de Ferrocarriles y la SNCF. Es un proyecto ambicioso que marca el inicio de la era de la alta velocidad ferroviaria en Marruecos y que permite reducir a la mitad los tiempos de viaje entre Tánger, Rabat y Casablanca.
Desde el 15 de noviembre, fecha de su inauguración por los Jefes de Estado marroquí y francés, Marruecos se convirtió así en el primer país de África en adquirir una línea de alta velocidad.
Tiene 323 km de largo y fue bautizada como Al-Boraq (البُراق) en referencia a la criatura mitológica con forma de caballo que transportó a los profetas islámicos.
La línea se estructura en dos secciones: la ruta entre Tánger a Kenitra y una ampliación desde Kenitra a Casablanca. Los 186 km de Tánger–Kenitra tienen una velocidad máxima de 320 km/h, mientras que los 137 km Kenitra–Casablanca alcanzaban una velocidad de 160 km/h cuando comenzó el servicio, y 220 km/h en la actualidad.
El proyecto movilizó a 5.000 trabajadores y ayudó a desarrollar las habilidades marroquíes en el ferrocarril. Algunos incluso lo ven como la base para el surgimiento de un sector ferroviario profesional rico en puestos de trabajo.
El operador ferroviario nacional ONCF está trabajando en varios proyectos. El proyecto más grande es un ferrocarril de alta velocidad desde Tánger a través de Rabat y Casablanca a Marrakech.
Asimismo, las autoridades encargadas del asunto ya aseguran que la tercera línea de LGV (línea de alta velocidad) está más cerca y pronto estará a disposición de los marroquíes, según reveló Atalayar.
Cabe mencionar que dentro de los futuros proyectos de la ONCF también se encuentra el proyecto de finalización de la línea de alta velocidad TGV que unirá Rabat y Fez.
En una primera fase, la Oficina Nacional de Ferrocarriles realizó estudios preliminares sobre la línea Rabat-Meknes que pasa por Jemisset.
Este estudio incluye fundamentalmente el impacto ambiental y social del proyecto, y un estudio pormenorizado y en profundidad de las previsiones de movilidad y circulación de viajeros y mercancías así como del retorno de la inversión de este plan.
Estas nuevas líneas permitirán garantizar el transporte ferroviario al 87% de la población en lugar del 51% actual.
La Oficina Nacional de Ferrocarriles asegura que esta tercera línea recorrerá un total de 1.300 km, convirtiéndose en la primera ruta que circula esa distancia en la historia del país.
Además, servirá para conectar 43 ciudades de todo el país, pasando de las 23 en las que se opera en estos momentos.
Precursor de la alta velocidad en África, el TGV marroquí es también el buque insignia de proyectos de transporte innovadores y ecológicos que se están extendiendo por todo el país, incluso en las zonas urbanas con los tranvías de Rabat y Casablanca.
«El reino alauí está siguiendo los pasos de naciones occidentales para mejorar la vida de sus ciudadanos y se está volviendo cada vez un país más moderno y adaptado a los últimos tiempos», dijo, hoy lunes, Atalayar.
Más que un tren, el TGV es una visión de futuro para el desarrollo del territorio marroquí: medios de transporte más modernos, más accesibles, menos contaminantes y que garanticen la seguridad de los pasajeros.
«En estos momentos, ningún país de África tiene una línea de LGV igual a la marroquí, lo que hace que el Reino se convierta en el rey de esta industria», confirmó el mismo diario.