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Meryem Ghoua
La guerra ruso-ucraniana llega en un momento en que el mundo sufre la falta de suministro de energía a cambio de una mayor demanda, especialmente con las bajas reservas -que es una de las razones de los saltos de precios desde el año pasado-.
De hecho, los países occidentales buscan fuentes de energía alternativas lejos de Rusia, ya que Moscú es uno de los principales actores en el suministro, especialmente para el continente europeo.
Con todos estos problemas globales, los países árabes, especialmente los Estados del Golfo, continúan desempeñando un papel destacado en la obtención de suministros de gas, en medio de nuevas inversiones en el campo de la investigación y la exploración, y su éxito en llegar a nuevos campos: un tipo de combustible fósil que algunos lo consideran un combustible de transición para lograr la neutralidad en carbono.
Según datos de la Organización de Países Árabes Exportadores de Petróleo (OAPEC), las exportaciones de gas natural licuado de los países árabes alcanzaron su nivel más alto desde 2013, según el sitio web especializado «Energy».
Las exportaciones árabes totales de gas licuado ascendieron a alrededor de 111,7 millones de toneladas durante 2021, en comparación con 104,5 millones de toneladas en 2020, con una participación de mercado global del 29,4%.
Es de recordar que el 10 de enero de 2022, la British Chariot Company anunció el descubrimiento de una importante reserva de gas frente a las costas de la ciudad de Larache, días después del inicio de las operaciones de perforación.
Asimismo, tras las operaciones de perforación a una profundidad de 2.512 mil metros para el pozo “Anchoua-2” frente a las costas marroquíes, la compañía descubrió un yacimiento de gas de alta calidad, con una capa neta de gas calculada de más de 100 metros.
Cabe destacar que el campo “Anchoa-2” está ubicado en la concesión en la que la británica Chariot posee una participación del 75%, y a cambio, la Oficina Nacional de Hidrocarburos y Minerales posee el 25% restante.
La directora general de la Oficina Nacional de Hidrocarburos y Minerales, Amina Benkhadra, había previsto el inicio de la producción del campo «Anchoa», descubierto en el área marina de Lixus, frente a Larache, para 2024.
Se espera que el nuevo descubrimiento contribuya a cubrir parte de las necesidades de Marruecos del gas necesario para generar electricidad, especialmente en las estaciones de Kenitra y Mohammadia, además de cubrir las necesidades de las actividades industriales de la región de Kenitra.
A principios de este año, la compañía “Predator Oil & Gas” anunció los detalles del enorme descubrimiento de gas en el área de Guercif.
