Rue20 Español/ Rabat
Una difícil temporada agrícola exige buscar las mejores y accesibles soluciones para afrontar este problema inesperado. El mundo rural es la gran víctima de la sequía que está amenazando la estabilidad de la economía marroquí. Ya sabemos que una parte importante de los ingresos proceden de la agricultura.
Los agricultores, cultivadores y ganaderos estaban esperando desde hace semanas la ayuda del Gobierno. Ahora ya se está materializando esta ayuda tras las instrucciones del Rey Mohamed Sexto al Ejecutivo para acompañar a los campesinos.
El programa excepcional, elaborado por el gobierno, en ejecución de las Altas Orientaciones Reales, para mitigar los efectos del retraso de las lluvias «ya empieza a aplicarse sobre el terreno», dijo el martes en Rabat el ministro de Agricultura, Pesca Marítima, Desarrollo Rural y Agua y Bosques, Mohamed Sadiki, según la agencia de noticias marroquí MAP.
«El programa excepcional, decidido de antemano, ha empezado a aplicarse sobre el terreno. Se han puesto en marcha las distintas licitaciones y se han acelerado todos los procedimientos administrativos, en la estela de las altas instrucciones de SM el Rey Mohammed VI», dijo Sadiki, quien intervenía en una reunión organizada por el ministerio con los profesionales del sector agrícola, representados por las cámaras de agricultura y algunas federaciones interprofesionales.
En cuanto al primer componente de este programa, relativo a las ayudas directas a los agricultores y ganaderos, el ministro señaló que se llevará a cabo a través de siete áreas de intervención que consisten a salvar el ganado en lo que respecta a los forrajes subvencionados, el abrevado del ganado y el seguimiento de la salud de las ovejas.
En lo referente al segundo componente, relativo a los seguros agrícolas, Sadiki destacó que su departamento, en colaboración con la Mutua Agrícola Marroquí de Seguros (MAMDA), trabajarán conjuntos para acelerar el procedimiento de indemnización para todas las explotaciones aseguradas, especialmente para los agricultores que hayan perdido su producción, precisando que las indemnizaciones comenzarán a partir de la segunda quincena de abril en lugar de julio.
En lo que atañe al tercer componente, que se refiere a la financiación, el ministro explicó que el banco reprogramará y se ocupará del endeudamiento de los agricultores, sobre todo de los pequeños y medianos, así como del establecimiento de nuevos productos para la financiación de la campaña de primavera con «un presupuesto bastante importante», además de la preparación de la próxima campaña y el apoyo al abastecimiento del país, sobre todo en materia de cereales.
El ministro también dijo que, además de esta operación, se pondrá en marcha otra a través de los servicios regionales que ya tienen mercados en las zonas más afectadas y que ya están distribuyendo cebada subvencionada.
Evocando el aspecto procedimental, el ministro explicó que para «simplificar y agilizar», es fundamental trabajar a través de una ventanilla verde, sin comisiones locales como ocurría antes, para no hacer más engorroso el procedimiento.
En este mismo contexto, Tariq Sijilmassi, presidente del Consejo de Administración del Grupo Crédit Agricole du Maroc (CAM), destacó que los 6.000 millones de dírhams (MMDH) movilizados por la CAM para el despliegue del programa gubernamental de lucha contra los efectos de la sequía tienen la particularidad de «estar bien adaptados a las necesidades de la situación actual».
Por su parte, el vicepresidente de la Confederación de Agricultura y Desarrollo Rural (Comader), Rachid Benali, señaló que este programa refleja sobre todo «la interacción rápida y salvadora» del Soberano con la situación que atraviesan los agricultores. Una reacción que, según él, sólo puede aliviar al agricultor, su tesorería y su ganado.
Cabe recordar que el programa excepcional requerirá una dotación financiera total estimada en 10 MMDH.
