Rue20 Español / Mequínez
Según un reciente estudio realizado por la Organización Mundial de Salud (OMS) junto con la Unicef, que se basa en sondeos con un total de 8.500 padres y 300 trabajadores de la sanidad en ocho países de todas las regiones, la exposición al márketing de leche de fórmula en Marruecos (3%) es menor en comparación con otros países.
La exposición a los mensajes de la industria es menor también en México (39%), Bangladesh (27%) Nigeria (24%), y Sudáfrica (21%).
Mientras que en China, un 97% de mujeres sondeadas dijeron haber estado expuestas al márketing de leche de fórmula, y en Vietnam, un 92%.
El Reino Unido es otro país donde un porcentaje muy elevado (84%) de mujeres reciben esos mensajes disuasivos de optar por la lactancia materna exclusiva, que de hecho solo un 1% de madres practican en este país.
El informe de la OMS y la Unicef desmenuza las técnicas que utiliza la industria para influir en las decisiones de los padres relativas a la alimentación de los recién nacidos y bebés, y entre las cuales está la utilización “invasiva” de mensajes dirigidos particularmente a las madres, redes de consejos y líneas de ayuda financiados por las compañías y promociones y muestras de regalo, informó EFE.
“Las compañías de leche de fórmula distorsionan la ciencia y la medicina para legitimar sus afirmaciones y promover sus productos”, afirma la OMS.
“En cuarenta años, el marketing de la leche de fórmula sigue representando uno de los mayores riesgos no reconocidos para la salud de los bebés y niños. Aumentar la lactancia materna evitaría la muerte de unos 800.000 niños menores de cinco años y 20.000 casos de cáncer de mama entre las madres cada año”, añade.
Según la OMS, los fabricantes de leche de fórmula han perfeccionado sus técnicas de marketing y han ido hasta utilizar argumentos falsos y distorsionar la ciencia para intentar convencer a las madres de que sus productos son equivalentes y hasta mejores que la leche materna para sus bebés.
Nadie puede negar las numerosas ventajas de la lactancia materna exclusiva hasta los seis meses de edad y su continuación hasta los dos años o más, que incluyen una poderosa defensa inmunitaria y contra la malnutrición.
La leche de fórmula nunca podrá sustituir la leche materna, ya que siempre existe una diferencia abismal entre lo natural y lo artificial.