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La muerte del niño Rayan, de cinco años, caído en un pozo en la región norteña de Chefchaouen, conmovió al mundo.
Inmediatamente después de que se anunciara la noticia de la muerte de Ryan, el presidente francés publicó una publicación en francés y árabe en su página oficial en la red social «Facebook», en la que compartía el sentido de dolor con el pueblo marroquí.
«Esta noche, me gustaría decirle a la familia del niño Rayan y al pueblo marroquí que compartimos su dolor», dijo.
Los marroquíes se entristecieron ayer sábado, por la muerte del niño Rayan, de cinco años, después de pasar 4 noches en un pozo de 32 metros de profundidad, en el que cayó en el grupo Tamrout en la región de Chefchaouen el pasado martes.
A pesar de los incansables esfuerzos de los equipos de rescate para sacarlo con vida, el niño no soportó por lad lesiones que había sufrido al caer.
