Rue20 Español/ Rabat
La Junta de Personal del funcionariado español en Marruecos ha pedido el cese de la exministra María Antonia Trujillo al frente de la Consejería de Educación de la Embajada de España en Rabat, en vista de las quejas de los docentes de los centros españoles en el país magrebí.
En una carta dirigida al director general de Planificación y Gestión Educativa fechada el 19 de enero, la junta se hace eco del «mayoritario sentir del profesorado español» y manifiesta su «profundo malestar por el modo en que la actual responsable conduce la Consejería de Educación».
Indica que la manera de trabajar de la que fuera ministra de Vivienda con José Luis Rodríguez Zapatero «está afectando al funcionamiento de la propia consejería y al de los centros educativos, al clima de trabajo en general y a la actividad cotidiana».
Entre otras cosas, afirma que no mantiene «una comunicación mínima con las direcciones de los centros», no responde a sus escritos ni escucha sus propuestas, y se muestra «insensible y ausente, cuando no amenazante».
También destaca su «falta de previsión y adopción de medidas extraordinarias» para sustituir al profesorado (en Marruecos hay unos 360 profesores españoles), lo que redunda en el «progresivo deterioro en el que se encuentra el servicio educativo» de los colegios que tiene España en Marruecos, una red compuesta por once centros educativos, la más extensa del mundo.
La carta menciona las quejas de los padres de los alumnos de estos colegios, que en el caso del centro de Rabat han hecho llegar una misiva al Defensor del Pueblo fechada el 26 de enero.
En este documento, la Asociación de Madres y Padres de Alumnos del Colegio Español de Rabat (AMPACER) se queja de que no se están cubriendo las bajas de docentes en el centro y pide que se permita contratar a profesores locales en Marruecos para llenar esos vacíos. EFE