Rue20 Español/El Aaiún
Marruecos y Costa de Marfil reafirmaron su compromiso con una «asociación estratégica» durante la quinta sesión de la Gran Comisión Mixta de Cooperación, celebrada en El Aaiún.
El Ministro de Asuntos Exteriores marroquí, Nasser Bourita, calificó la relación bilateral como un modelo de cooperación Sur-Sur, destacando la visión compartida de ambos jefes de Estado para un continente africano unido y próspero.
Bourita subrayó la solidez de los lazos históricos entre ambos países y la importancia de la reunión para fortalecer el diálogo político y trazar el futuro de la cooperación. Esta asociación, según el ministro, se basa en fundamentos sólidos, con un contenido realista y socios diversificados, evidenciado en la colaboración en áreas como infraestructuras.
La presencia económica marroquí en Costa de Marfil, descrita como «sin parangón en África», fue otro punto destacado. Bourita anticipó la firma de nuevos acuerdos que crearán un entorno favorable para los negocios y ampliarán la colaboración en beneficio mutuo.
El ministro marroquí agradeció el apoyo firme de Costa de Marfil a la integridad territorial de Marruecos y a la marroquinidad del Sáhara, recordando la apertura de un consulado general marfileño en El Aaiún en 2020.
Si bien reconoció el desarrollo de las relaciones comerciales, instó a una mayor diversificación para alcanzar el potencial de ambos países, llamando a los operadores económicos a aprovechar las oportunidades de inversión, especialmente en tecnología, para afrontar los retos del desarrollo sostenible.
Marruecos reiteró su disposición a compartir experiencias en el ámbito científico y técnico con Costa de Marfil. Bourita destacó el compromiso marfileño con el proyecto del gasoducto atlántico africano, un megaproyecto en fase avanzada que, según él, simboliza la cooperación Sur-Sur y beneficiará a millones de personas en África Occidental, impulsando el desarrollo del continente.
El ministro concluyó recordando las iniciativas lanzadas por el Rey Mohammed VI en beneficio de los países africanos, particularmente las destinadas a facilitar el acceso al océano Atlántico para los países del Sahel, promoviendo una nueva era de desarrollo, estabilidad y prosperidad en África. Estos proyectos estructurales, afirmó, ejemplifican la cooperación Sur-Sur que debe ser fomentada para alcanzar los objetivos de desarrollo del continente.
