Rue20 Español/Rabat
El periódico francés Le Monde publicó un informe que analiza el notable declive del papel de Argelia en la región del Sahel y los desafíos de seguridad que enfrenta en la zona.
El informe señala que Argelia ha perdido la «autoridad» que tenía en las décadas de 1960 y 1970, mientras que Marruecos se destaca como un actor regional que presenta iniciativas en beneficio de los países del Sahel.
Titulado En el Sahel, la estrella palidecida de Argelia, el informe de Le Monde explica que Argelia enfrenta desafíos sin precedentes en sus fronteras del sur con los países del Sahel, que buscan liberarse de la influencia de potencias extranjeras.
La ciudad de Tinzaouatín, ubicada en la frontera entre Argelia y Malí, se ha convertido en un punto álgido de los conflictos regionales, con el aumento de los movimientos separatistas y los enfrentamientos armados.
Le Monde señala que la situación tensa ha llevado a Argelia a aumentar significativamente el gasto militar, que alcanzó los 3.349 billones de dinares en 2025, lo que equivale al 20% del presupuesto general.
El informe también destaca la gran tensión en las relaciones entre Argelia y Malí, con acusaciones mutuas de interferencia en los asuntos internos.
El informe señala que Bamako rechazó el Acuerdo de Argel de 2015, considerándolo una herramienta de dominación argelina y acusando a Argelia de interferir en sus asuntos internos.
Agrega que esta postura ha hecho que Argelia pierda una de sus cartas diplomáticas más importantes en el Sahel.
Le Monde menciona que fuentes malienses acusan a Argelia de brindar apoyo indirecto a algunos grupos armados, como el que recibe el líder del Grupo de Apoyo al Islam y los Musulmanes.
Bamako considera que este apoyo tiene como objetivo mantener los conflictos en las fronteras de Argelia bajo su control.
El informe también aborda el creciente poderío de los Emiratos Árabes Unidos en el Sahel, que añade más presión a Argelia. Señala que los Emiratos Árabes Unidos están trabajando para ampliar su papel en Sudán, Libia y Chad, lo que amenaza con socavar la influencia argelina.
La preocupación de Argelia no se detiene ahí. El informe de Le Monde indica que la amenaza más importante para Argelia radica en la nueva dinámica regional liderada por Marruecos.
Rabat ha fortalecido sus relaciones con los países del Sahel, especialmente con la junta militar gobernante en Malí, ofreciendo propuestas económicas como la de proporcionar un acceso al Atlántico para los países del Sahel sin litoral.
A pesar de los esfuerzos diplomáticos, el informe señala que la presencia económica de Argelia en el Sahel es muy limitada, lo que dificulta su capacidad para fortalecer su influencia.
Agrega que Argelia está actualmente tratando de aliviar la presión diplomática mejorando sus relaciones con Níger y Mauritania, y reconstruyendo sus relaciones con Rusia.
