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En 2024, Marruecos se ha consolidado como un actor clave en el sector del cannabis legal, gracias a una estructuración rigurosa de esta emergente industria económica.
La Agencia Nacional de Regulación de las Actividades Relativas al Cannabis (ANRAC) ha presentado resultados impresionantes: 4.082 toneladas de cannabis legal producidas, distribuidas en 2.169 hectáreas cultivadas.
Este sector, enmarcado por un estricto marco regulatorio, aspira a convertirse en un modelo de desarrollo socioeconómico para las regiones involucradas.
El año 2024 ha marcado un progreso espectacular en la expedición de autorizaciones. Con 3.371 autorizaciones concedidas, frente a solo 430 en 2023, este aumento refleja una fuerte adhesión de los agricultores y operadores al marco legal establecido.
Entre estas autorizaciones, 3.056 se han concedido a agricultores para el cultivo y la producción, y 315 a operadores para actividades que van desde la transformación (77) hasta la comercialización (83), pasando por la exportación (67) y la creación de viveros (2). Estas cifras reflejan una dinámica sin precedentes, respaldada por la voluntad estatal de modernizar este sector y al mismo tiempo reforzar la inclusión económica en las regiones productoras, principalmente ubicadas en el norte del país.
La gestión rigurosa de las semillas también ha desempeñado un papel crucial en estos logros. En 2024, 7,6 millones de semillas importadas fueron certificadas por la ANRAC, mientras que 1.717 quintales de semillas locales «Beldia» se distribuyeron a 112 cooperativas. Estos esfuerzos han permitido la plantación de 2.169 hectáreas, divididas entre 1.701 hectáreas de la variedad local Beldia, cultivadas por 1.767 agricultores agrupados en 109 cooperativas, y 468 hectáreas de variedades importadas, explotadas por 880 agricultores repartidos en 80 cooperativas.
Los rendimientos agrícolas han sido alentadores, con una media de 17 quintales por hectárea para la variedad local y de 28 quintales para las variedades importadas, lo que ha dado lugar a una producción total de 4.082 toneladas para el año.
Paralelamente, la ANRAC ha llevado a cabo iniciativas cruciales para consolidar este sector, como la puesta en marcha de procedimientos estrictos para la utilización de las semillas, la movilización de financiación para los pequeños agricultores y misiones de prospección con el objetivo de promover los productos del cannabis legal en los mercados internacionales.
Estos esfuerzos pretenden garantizar un marco seguro para los agricultores y reforzar la competitividad de los operadores en el escenario mundial.
Además, la agencia tiene previsto intensificar sus acciones en 2025 para estructurar aún más el sector y maximizar sus repercusiones económicas, en particular facilitando el acceso a los mercados internacionales y valorizando los productos derivados de la producción legal.
El desarrollo del cannabis legal en Marruecos, tal y como lo ha organizado la ANRAC, representa sin duda una transformación importante en la economía agrícola del país.
Con cifras impresionantes, cientos de cooperativas implicadas y una producción que alcanza las 4.082 toneladas en 2024, el sector parece por fin liberarse de décadas de vacío legal y explotación no regulada.
