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Fouzia El Berchidi
Tras varios meses de suspensión, las exportaciones de mandarinas marroquíes a Rusia se reanudarán a finales de 2024.
Este relanzamiento del comercio representa una gran oportunidad para el sector agrícola marroquí y marca un paso importante en la cooperación comercial entre los dos países.
Rusia, en particular, ve en Marruecos un socio estratégico para diversificar sus fuentes de suministro de productos frescos y de calidad; mientras que Marruecos se beneficia del tamaño del mercado ruso para vender sus productos.
Hace apenas diez años, Marruecos desempeñaba un papel importante en el suministro de mandarinas, ocupando más de un tercio de todo el mercado ruso. Se trataba principalmente de mandarinas de la variedad clementina: dulces, de piel fina y casi sin semillas, según recoge el medio L’Opinion.
Así lo habló a los medios de comunicación de su país el representante comercial de la Federación de Rusia en el Reino, Alexéi Andreev: «El período de septiembre a noviembre se caracteriza tradicionalmente por una actividad de mercado extremadamente baja, como lo demuestran las estadísticas aduaneras», tal como menciona la misma fuente.
Las principales entregas se realizan generalmente entre diciembre y enero. Además, el mercado de los cítricos es muy competitivo y Marruecos ha sufrido una sequía en los últimos años, lo que provoca, entre otras cosas, un notable aumento del coste de los productos agrícolas”, explicó el comercial.
Sin embargo, persisten los desafíos logísticos; el transporte de mandarinas a Rusia requiere una rigurosa coordinación logística, sobre todo por la distancia y las sanciones internacionales que pesan sobre Rusia.
A pesar de estos obstáculos, los actores del sector parecen confiar en la capacidad de Marruecos para satisfacer la demanda rusa, basándose en una infraestructura modernizada y una experiencia exportadora demostrada.
Este sector emplea a miles de trabajadores y es una fuente esencial de ingresos para muchas familias.
El regreso de las mandarinas al mercado ruso no sólo estabilizará los ingresos de los productores, sino que también fortalecerá a todo el sector agrícola marroquí.
Los expertos esperan que este relanzamiento pueda allanar el camino para nuevos acuerdos comerciales y una profundización de las relaciones económicas entre Marruecos y Rusia en los próximos años.
