Rue20 Español/Ceuta
En un gesto de cooperación internacional, las autoridades marroquíes han demostrado una vez más su firme compromiso con la seguridad fronteriza.
Marruecos logró detener a aproximadamente 300 personas que intentaban cruzar hacia la ciudad ocupada de Ceuta, evitando así una potencial crisis migratoria, según fuentes locales.
El presidente de la Ciudad ocupada de Ceuta, Juan Vivas, destacó la importancia de esta acción; afirmando que «gracias a ese comportamiento y a la colaboración de Marruecos se consiguió evitar el intento de llegar a Ceuta del orden de 300 o 350 personas».
Esta intervención oportuna por parte de las fuerzas de seguridad marroquíes ha sido fundamental para mantener la estabilidad en la región.
La situación se desarrolló durante una noche de intensa actividad en la frontera, donde la presión migratoria podría haber alcanzado niveles críticos de no ser por la rápida respuesta de Marruecos.
«Fue una noche de presión que pudo ser crítica si Marruecos no hubiera intervenido», señaló Vivas, subrayando la importancia de la cooperación bilateral en materia de control migratorio.
Este incidente pone de manifiesto la efectividad de la colaboración de Marruecos en el control de los flujos migratorios.
La actuación de las autoridades marroquíes no sólo ha prevenido una potencial crisis humanitaria, sino que también ha reforzado los lazos de cooperación entre ambos países.
El presidente Vivas hizo un llamado a la calma y agradeció el trabajo conjunto.
«Quiero transmitir esa tranquilidad a la población de Ceuta», afirmó, atribuyendo la situación controlada «fundamentalmente al buen trabajo de las fuerzas de seguridad».
Este episodio subraya la importancia de mantener y fortalecer la colaboración con Marruecos en materia de seguridad fronteriza, demostrando que el trabajo conjunto es esencial para abordar los desafíos migratorios en la región del Estrecho de Gibraltar.