Rue20 Español/ Fez
Meryem Ghoua
Durante varias entrevistas antes y después de los Juegos Olímpicos de París 2024, donde ganó dos medallas de oro, Teddy Riner siempre expresa su apego a la ciudad ocre del reino, Marrakech, así como a todo Marruecos.
“Amo esta ciudad, este país, Marruecos. Hace buen tiempo, tengo unas condiciones de vida y de entrenamiento ideales y rivales marroquíes y franceses que me desafían a diario. Con la edad, entendí que mi entorno de vida era fundamental para mi éxito”, confió durante una entrevista con la revista Gala .
“Necesito dulzura, serenidad y tranquilidad para afrontar las grandes dosis de trabajo que me impongo, lejos de la presión de París. También cambié mi organización con la llegada a mi lado de un nuevo entrenador, Christian Chaumont, que refuerza mi plantilla”, añadió.
“Vengo buscando mucha inspiración, relajación y hermosos paisajes. No podemos oír nada excepto nuestros propios pasos. Ese es un silencio tranquilizador, es plenitud en todo su esplendor”, añadió.
Después de ganar su primera medalla de oro en los Juegos Olímpicos de París, Teddy volvió a hablar de Marruecos y de la hospitalidad marroquí: “Es un país que siempre me ha acogido bien. No hay muchos lugares donde me sienta tan a gusto, pero en Marrakech me siento realmente como en casa.
«Marruecos se ubica cerca de París y la gente es extraordinariamente amable conmigo. Cuando entreno, hacen todo lo posible para que pueda rendir, así que, francamente, les doy las gracias todos los días», agregó.
Doble campeón olímpico en los Juegos de Francia, el francés, de 35 años, se convirtió en el judoka más condecorado de la historia de los Juegos Olímpicos, con siete premios (cinco oros, dos bronces).