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Comunicado de Aziz Akhannouch
El discurso de Su Majestad el Rey Mohammed VI, que Dios lo ayude y proteja, que pronunció ayer sábado 6 de noviembre, con motivo del 46 aniversario de la Marcha Verde, se distinguió, como es habitual, por la claridad, franqueza, firmeza, así como por dar un espíritu positivo y una orientación hacia el futuro.
El discurso real puso los puntos sobre las íes sobre la evolución de nuestro expediente de la integridad territorial, al tiempo que dejó claro, a quienes necesitan confirmación, que Marruecos no está negociando sobre la marroquinidad del Sahara, sino que está buscando una solución pacífica a este conflicto artificial.
Con el tiempo, la iniciativa marroquí está recibiendo cada vez más apoyo a nivel internacional.
Su Majestad el Rey puso énfasis sobre los importantes logros diplomáticos que se han alcanzado, destacando que esta dinámica no hay quien la pare.
Su Majestad se refirió al proceso de desarrollo en el Sahara marroquí y los logros de desarrollo de las provincias del sur, que se reflejan de manera tangible en la vida diaria de sus habitantes.
Como dijo Su Majestad el Rey, esto se ha logrado gracias a socios internacionales honestos y a un sector privado nacional marroquí que está haciendo todo lo posible para contribuir a este desarrollo y hacer de las provincias del sur un verdadero polo de atracción de inversiones y desarrollo económico.
Además, es necesario captar el mensaje de los ciudadanos marroquíes en nuestras provincias del sur durante las elecciones generales del 8 de septiembre de 2021, reflejado en la tasa récord de participación en las tres regiones.
Esto en sí mismo es una respuesta suficiente a los oponentes de nuestra integridad territorial y zanja el debate sobre los representantes legítimos de los ciudadanos en las regiones del sur lejos de las calumnias de los enemigos.
Marruecos es un país responsable que respeta sus obligaciones internacionales, se adhiere a la paz y utiliza métodos diplomáticos para defender su Sahara.
Aprovecho la oportunidad también para subrayar los deseos de Su Majestad a la prosperidad y estabilidad para los pueblos del Magreb, que es un mensaje contundente que confirma el entusiasmo de Marruecos y del Rey por la unidad de los pueblos de la región y el desarrollo y la mejora que se merecen.
Traducido por Ismail El Khouaja
