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Ismail El Khouaja
Si algún día caerá un meteorito en Argelia, los generales dirigirán su mirada hacia el oeste. Entonces el régimen militar no dudará en salir inmediatamente con un comunicado acusando a Marruecos de aliarse con extraterrestres para conspirar contra Argelia. Puede parecer exagerado pero la estupidez de los generales no tiene límites.
En verano, como consecuencia de nada más una interacción del embajador permanente de Marruecos en la ONU, Omar Hilale, respecto al pueblo cabileño que lleva años pidiendo la independencia, el régimen militar prendió fuego en toda la región cabileña acusando a Marruecos por tal acto.
Marruecos, aún así, ofreció ayuda dedicando 2 Canader para apagar el fuego que desafortunadamente llevaba varios días quemando a ciudadanos inocentes, víctimas de las tonterías del régimen.
En sus dos últimos discursos, el rey Mohammed VI dedicó gran parte a Argelia, pidiendo entonces pasar página y unirse para formar un polo estratégico en el Magreb para el bien de los dos pueblos hermanos, así como para despejar el camino hacia revivir el sueño de la Unión del Magreb.
El pueblo argelino reaccionó positivamente a la iniciativa del rey expresando su alegría de volver a reforzar los lazos familiares entre los dos países contados por el régimen, pero los generales han tenido otra opinión.
Cortaron unilateralmente las relaciones diplomáticas con Marruecos, cerraron el espacio aéreo argelino contra los aviones civiles y militares marroquíes y últimamente cerraron el megaproyecto del Gasoducto Magreb-Europa (GME) que sale de Argelia para llegar a España discurriendo por territorio marroquí.
Toda una serie de incomprensibles decisiones que no están a favor ni de la propia Argelia que depende en gran medida de las importaciones del gas y que está atravesando por una asfixiante crisis interna (externa también) que ha dejado al pueblo argelino tirarse en el mar en busca de una vida digna.
El rey Mohammed VI, en cambio, ignoró totalmente hablar de Argelia específicamente en el discurso de hoy conmemorativo al 46 aniversario de la gloriosa Marcha Verde. Se limitó a desear la estabilidad y prosperidad a los cinco países del Magreb.
Ignorar es ya en sí un mensaje en clave que ahora está dejando que los teléfonos de los generales echen humo cuestionando qué ridícula película van a filmar para culpar a Marruecos de algo.
La respuesta del régimen militar argelino ante la mano tendida del rey ha sido cortar las relaciones diplomáticas y cerrar el espacio aéreo y el GME. En sentido contrario, ¿qué va a pasar?
Ahora todo el mundo espera la respuesta del régimen que hoy en día se encuentra más aislado que nunca, sobre todo tras la resolución 2602 en la que 13 de los 15 países miembros de la ONU apoyaron extender el mandato de la MINURSO, afirmando de este modo su apoyo a la iniciativa marroquí en el Sáhara.
Todo apunta que el régimen militar está viviendo su ocaso por su estupidez y odio a Marruecos.
