Rue20 Español/Nueva York
El Abbas Tahri Joutey Hassani
Los Emiratos Árabes Unidos han asestado un duro golpe a aquellos que se escudan en consignas vacías y afirmaciones falsas; a quienes sólo ondean la bandera palestina en los estadios y en las redes sociales.
A pesar de ser miembro no permanente del Consejo de Seguridad de la ONU, Argelia no se atrevió a dar el paso que sí ha dado Abu Dhabi: presentar una propuesta en nombre del grupo árabe para que Palestina sea admitida como miembro de pleno derecho en las Naciones Unidas, al cumplir con todos los requisitos necesarios; aunque Argelia ya había presentado la misma propuesta y fue rechazada.
Argelia, con su posición actual en el Consejo de Seguridad y con las consignas que ha pregonado al mundo como «con Palestina, oprimida u opresora», debería haber sido la que diera este paso.
Sin embargo, los militares argelinos se han mostrado reticentes a poner en práctica esta idea; ya que Palestina nunca ha sido una prioridad para el régimen militar, sino una mera moneda de cambio en el ámbito interno e internacional.
La propuesta de los Emiratos Árabes Unidos ha marginado el papel de Argelia y ha puesto de manifiesto su hipocresía política y diplomática.
La magnitud de la victoria palestina es fruto de una coordinación al más alto nivel, en la que han participado el Reino de Marruecos, los Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudita y el resto de los países árabes.
Argelia, por su parte, ha quedado al margen y no ha aportado nada a la causa, salvo consignas y algo de dinero para comprar la postura de algunas facciones islamistas e ideologizadas.