Rue20 Español/ Fez
Meryem Ghoua
Marruecos se está preparando a lo grande para albergar la Copa del Mundo de 2030, que coorganiza con España y Portugal. El Reino no se contentará con partidos de la fase de grupo, octavos, cuartos o semifinales, su objetivo es acoger la finalísima. Este es el gran sueño de España también.
Es por eso que la sede de la final es una disputa entre España y Marruecos, puesto que ninguno de los estadios portugueses tiene la capacidad suficiente para albergar esta gran cita.
En Marruecos apuestan por organizar la final en el gran estadio que construirán en la afueras de Casablanca mientras que la crisis en la que está ahogada la Federación Española de Fútbol podría tener consecuencias que se alarguen en el tiempo. La vista está puesta en el Mundial 2030 y en una final que podría terminar no disputándose en el vecino del norte.
El último quien habló de la crisis de la RFEF y la final del Mundial-2030 ha sido el presidente de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE), David Aganzo.
En declaraciones a FutbolJubs, Aganzo afirmó, ayer martes, que todos los problemas que vive en este momento el fútbol español no tendrán «consecuencias internacionales» y aseguró que perder la final del Mundial 2030 a favor de Marruecos «sería un fracaso absoluto de la RFEF y del Gobierno».
«Espero que todos los problemas que estamos viviendo no tengan consecuencias internacionales y que España sea un digno anfitrión del Mundial», añadió y confirmó que «hay que ser realistas y darnos cuenta de que Marruecos está aprovechando la situación para intentar llevarse la final que debería jugarse en España».
Aganzo, que recibió ayer el Premio FutbolJubs que ganó la Asociación de Futbolistas Españoles por su labor en favor de los y las futbolistas durante sus 46 años de historia, agregó que el fútbol español ha quedado «muy tocado a nivel internacional» por todo lo que se está investigando judicialmente y «por lo que sigue pasando».
«Cuando viajo al extranjero, todas las personalidades del fútbol mundial con las que hablo me dicen lo mismo: ‘¿Qué está pasando en España? ¿Cómo es posible que se produzcan ese tipo de episodios?’ Ojalá podamos superar estos tristes episodios dentro de la historia negra del fútbol español sin graves consecuencias y que se abra una nueva etapa de mayor claridad y diálogo entre las instituciones», concluyó.
Es de señalar que la FIFA tenía muy claro que España debía ser el eje del Mundial 2030, con el Bernabéu como escenario final, pero las actuales circunstancias han debilitado la posición española hasta límites que nadie podía prever.
Marruecos va con todo para ser la sede de la gran final del Mundial-2030 y lo que parecía imposible hace tiempo ya dejó de serlo gracias a la gran labor que desempeña la Federación Real Marroquí de Fútbol, presidida por Fouzi Lekjaa.