Rue20 España/Rabat
La Oficina Nacional de Seguridad Sanitaria de Productos Alimenticios [ONSSA] ha revelado, hoy viernes, que las fresas marroquíes exportadas desde Marruecos están libres del «virus de la hepatitis A» y del «virus Novovirus»; tras recibir los resultados de las pruebas de laboratorio sobre el tema.
Los servicios de la ONSSA tomaron varias muestras de agua de riego y fresas a nivel de la unidad y el campo con el fin de evaluar su calidad y determinar cualquier posible riesgo sanitario; revelando que «los análisis de hepatitis A y virus Novovirus fueron negativos, y no se detectó ninguna contaminación en el agua de riego», según confirma la misma Oficina.
Además, los usuarios del campo están sujetos a un estricto control para garantizar la seguridad sanitaria.
La misma fuente explicó que el lote de fresas en cuestión estaba destinado a la exportación, no al mercado local.
El programa anual de vigilancia y control de la ONSSA a nivel del mercado nacional incluye cientos de muestras de frutos rojos; todas ellas sanas y conformes a las normas de seguridad sanitaria.
Estas investigaciones se producen tras el desarrollo de la notificación sanitaria española sobre un lote de fresas exportadas desde Marruecos.
Por ello, la Oficina Nacional de Seguridad Sanitaria de Productos Alimenticios procedió a abrir una indagación y realizar las investigaciones necesarias que permitieron identificar el campo y la unidad de envasado implicados; así como rastrear el envío de fresas exportadas.
Las mismas fuentes subrayan que las fresas comercializadas en el mercado local o destinadas a la exportación «están sujetas a un control riguroso» por parte de los servicios de la Oficina Nacional de Seguridad Sanitaria de los Productos Alimenticios.
La activación por parte de la Unión Europea del Sistema de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos se produjo tras «la detección de una contaminación por hepatitis A en fresas importadas de Marruecos», según la notificación emitida por España; que indica que «los análisis realizados por un puesto de inspección han revelado niveles de contaminación superiores al límite máximo autorizado».
Este asunto surge semanas después de la guerra que los agricultores españoles han emprendido contra los productos marroquíes; en la que los exportadores marroquíes han sufrido importantes pérdidas debido a la destrucción de considerables cargamentos de exportaciones por valor de varios millones; además de los daños sufridos por los camiones que transportaban estos productos.
Los profesionales marroquíes no descartan que la alerta lanzada por la Unión Europea sobre las fresas marroquíes se enmarque en la guerra que los lobbies europeos están llevando a cabo contra los productos marroquíes; especialmente en el vecino del norte, cuyos profesionales ultraderechistas están muy molestos por la fuerza y la competitividad de las exportaciones marroquíes.
