Rue20 español/ Rabat
Ikram Oualla
El pasado viernes 11 de agosto marcó un hito climático en Marruecos, con la constatación de un récord de temperatura sin precedentes. En consecuencia,el termómetro ascendió a 50,4 grados centígrados en la región de Sus-Masa, estableciendo así una nueva marca de temperatura absoluta en el país.
Este fenómeno fue parte de una intensa ola de calor que se prolongó durante tres días consecutivos. Durante este período, el ambiente estuvo influenciado por «chergui», un viento cálido y seco proveniente del Sáhara, que aportó un componente adicional de sofocante calor a la región.
Para complicar aún más las condiciones, las tormentas de arena también se sumaron a la ecuación, creando un escenario climático excepcionalmente desafiante, no solo para las personas sino también, y con más asiduidad, para la campaña de tomates y hortalizas. Ante la perspectiva de una campaña afectada de manera significativa, los agricultores vislumbran pronósticos de consecuencias considerables.
En este sentido, en una entrevista concedida a FrechPlaza, un agricultor amparado en el anonimato explicó que «Todavía estamos evaluando los daños y es aún muy pronto para cuantificarlos, pero puedo decir que los daños son muy cuantiosos. Las quemaduras solares no son generalizadas, pero, con todo, afectan a grandes áreas donde habrá que replantar». Como consecuencia de estas quemaduras solares, el mismo agricultor anticipa «escasez de semillas para sustituir las plantas que quemó el sol», al mismo tiempo que prevé «Esto quiere decir que la campaña de tomate y de hortalizas tempranas se retrasará este año».
Por su parte, Mehdaoui Elmokhtar, citricultor de la región de Hauara, en las cercanías de Agadir, compartió con FreshPlaza su evaluación sobre los perjuicios acaecidos en su explotación «En cuanto a los daños, mi primera estimación es del orden de un 5% de quemaduras solares (es decir, el 5% de los volúmenes), y coincide con los primeros grupos».
En esta misma línea, los árboles frutales también experimentan los efectos adversos de las elevadas temperaturas, lo cual queda manifiesto en una declaración recogida de SNRTNEWS, en la que el investigador en el sector agrícola y presidente de la Asociación Marroquí para el Desarrollo Agrícola en la región de Casablanca-Settat, Fatmi Bourkizia, estima que «el cultivo del olivo sea una de las cosechas más afectadas por el calor este año, junto con higos y maíz, así como todos los árboles frutales». Asimismo, el mismo interlocutor presagia, en una declaración a SNRTnews, que «nos enfrentaremos a una temporada débil», de modo que la cosecha del olivo «estará por debajo del nivel requerido». En este contexto, será afectada también «Kelaat Sraghna, que alberga una gran cantidad de olivos no regados, ya que no ha tenido lluvias desde el inicio del pasado mes de marzo» agregó Fatimi.
No obstante, el viento va a popa en lo relativo al cultivo de las manzanas, lo cual explicó, en una declaración a SNRTnews, Mohammed El Yazid, técnico agrícola, señalando que «que las cosechas variarán de una región a otra, considerando que hay lugares que se beneficiaron de las lluvias y nevadas primaverales, a diferencia de otras áreas. En cuanto a la cosecha de manzanas, afirmó que será relativamente alta en comparación con la temporada pasada, gracias al aprovechamiento del suministro hídrico proveniente de la nieve que cayó el pasado mes de marzo».
