Rue20 Español/ Rabat
Las autoridades españolas en colaboración con sus homólogas marroquíes han detenido a dos personas en Benavente (Zamora) y Cullera (Valencia) por su implicación en la mayor estructura yihadista conocida en España en el ámbito de la captación de jóvenes y menores de edad. Los detenidos fueron puestos a disposición judicial el 4 de agosto, cuando se decretó su ingreso en prisión provisional, según anunció el Ministerio de Interior español en las últimas horas.
La operación se ha desarrollado conjuntamente entre el Servicio de Información de la Guardia Civil y la Direction Générale de la Surveillance du Territoire (DGST) marroquí, bajo la dirección del Juzgado Central de Instrucción nº 6, el Juzgado Central de Instrucción nº 3 (en funciones de Guardia) y de la Fiscalía de la Audiencia Nacional, añade la misma fuente.
En el marco de las labores de detección temprana de potenciales amenazas de índole terrorista a la Seguridad Nacional, el Servicio de Información de la Guardia Civil inició la investigación sobre dos personas que, si bien estaban ubicadas en provincias diferentes, actuaban concertada y coordinadamente en el ámbito virtual para captar y adoctrinar en los postulados del terrorismo yihadista a otros usuarios de redes sociales.
Ambos elaboraban y divulgaban de manera pública contenido terrorista que les permitía identificar y seleccionar a aquellos usuarios más proclives a la radicalización. Posteriormente, pasaban a formar parte de un grupo privado, administrado por los dos detenidos, en el que se identificado a decenas de usuarios en toda España, con más de diez provincias afectadas hasta la fecha.
Las investigaciones han constatado cómo las actividades de proselitismo de los detenidos trascendían el ámbito virtual, habiéndose detectado varias pintadas en vías públicas en la que éstos exponían los lemas de la organización terrorista DAESH tales como “DAWLAT AL ISLAM BAQUIYAH”, que significa “Estado Islámico permanece y se expande”.
La audiencia sobre la que los investigados focalizaban sus actividades de adoctrinamiento terrorista estaba formada mayoritariamente por jóvenes de 18 años y menores de edad, lo que indica una clara voluntad de alcanzar a un público especialmente vulnerable a los procesos de radicalización, empleando para ello una estrategia multiplataforma basada en un uso combinado de las principales redes sociales usadas en ese rango de edad.
Las decenas de usuarios presentes en el grupo privado administrado por ambos han sido receptores de contenidos audiovisuales, mensajes y consignas idóneas para captar y radicalizar nuevos adeptos a la causa terrorista. Los investigados llevaron a cabo la edición propia y la traducción de contenidos originales en otros idiomas del ámbito mediático de la organización terrorista DAESH al español, lo que indica una clara intencionalidad de dirigirse hacia la comunidad joven hispanohablante, facilitando el acceso a contenidos terroristas a los que, en su versión original, se dificultaría su plena compresión.
La actuación de la Guardia Civil sobre las potenciales víctimas que han podido ser identificadas en el marco de los procesos de radicalización se ha diseñado contando con la participación de personal especialista en la atención e intervención con víctimas menores de edad en un contexto de vulnerabilidad.