Rue20 Español/ Rabat
El nuevo orden mundial se está construyendo poco a poco sin unas líneas generales. Un nuevo mundo sin pistas, pero con señales. Estas señales se pueden usar para intentar comprender la dirección de los vientos. El nuevo acercamiento entre Irán y Arabia Saudita viene en este contexto.
El ministro de Relaciones Exteriores de Arabia Saudita, el príncipe Faisal bin Farhan, visita hoy sábado Teherán donde se reune con funcionarios iraníes, según la agencia saudí de noticias y la agencia de noticias semioficial de Irán Tasnim.
Irán y Arabia Saudita acordaron en marzo, en un acuerdo negociado por China, poner fin a su ruptura diplomática y restablecer las relaciones luego de años de hostilidad que habían puesto en peligro la estabilidad regional, incluso en Yemen, Siria y el Líbano.
Arabia Saudita cortó las relaciones diplomáticas con Irán en 2016, debido a los ataques de manifestantes de la mayoría chiíta a su embajada en Teherán, enojados por la ejecución en Riad de un destacado clérigo chiíta.
Posteriormente, el Reino Saudita les pidió a los diplomáticos iraníes que se marcharan en un plazo de 48 horas mientras evacuaba a su personal de la embajada de Teherán.
Irán reabrió oficialmente su embajada en Arabia Saudita el 7 de junio.
«La delegación iraní tomará las medidas necesarias en Riad y Yeda para establecer la embajada y el consulado general», dijo en un comunicado el portavoz del Ministerio de Exteriores iraní, Nasser Kanaani.
La relación había empezado a empeorar un año antes, después de que Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos intervinieran en la guerra de Yemen, donde el movimiento houthi, alineado con Irán, había derrocado a un gobierno respaldado por Arabia Saudita y tomado la capital, Saná, según escribió la agencia saudí.
Riad acusó a Irán de armar a los houthis. En 2019, el reino culpó directamente a la República Islámica de un ataque contra instalaciones petrolíferas de Aramco que dejó fuera de combate la mitad de su producción de petróleo.
