Rue20 Español/ Casablanca
Entrevistado por Toufiq Slimani
La decisión española de respaldar el Plan de Autonomía para el Sahara planteado por Marruecos desde 2007, no será afectada por un posible cambio de Gobierno en España. Las recientes elecciones autonómicas y municipales españolas han abierto un nuevo ciclo político que acerca más el PP liderado por Alberto Núñez Feijóo a la Presidencia del Gobierno español. Un Gobierno del PP mantendrá las excelentes relaciones bilaterales con Marruecos.
Así lo deja muy claro Mohamed Benabdelkader, exministro de Justicia, dirigente del USFP, en esta entrevista concedida a Rue20 Español.
Mohamed Benabdelkader, ex ministro de Justicia, es uno de los pocos hispanistas y académicos marroquíes comprometidos con el análisis del estado de las relaciones entre ambos países. Nació en Tetuán, en 1961. Milita en el Partido Socialista Marroquí. Además, Benabdelkader es analista del discurso.
En esta entrevista concedida a Rue20 Español, con motivo de las recientes elecciones autonómicas y municipales españolas, Benabdelkader analiza los resultados electorales, la subida del PP y la derrota del PSOE y la izquierda.
Benabdelkader es uno de los socialistas marroquíes conocedores de la vida política española. Fue elegido por el difunto y primer secretario del partido en 2008, Abdelouahed Radi, como responsable de las relaciones con el PSOE y los partidos de izquierda en América Latina.
1. ¿Partiendo de su larga y destacada trayectoria política y gubernamental, qué conclusiones se puede sacar de los resultados de las recientes elecciones autonómicas y municipales en España?
Desde mi punto de vista, las conclusiónes mas importantes que se pueden destacar de las elecciones autonómicas y municipales del 28M, son tres:
-La aplastante victoria de la derecha, aunque pronosticada por las encuestas, fue mayor de lo esperado.
-Este giro español de la izauquirda a la derecha aceleró el adelanto electoral y obligó al presidente del Gobierno Pedro Sánchez a convocar, en una reacción rápida, las elecciones generales para el 23 de julio próximo.
-La extrema derecha con su avance electoral, sustituye a la derrotada extrema izquierda en cumplir el papel de partido bisagra, lo que significa que VOX se convierte hoy en la clave de gobierno para el PP en varios territorios y probablemente en la constitución del Ejecutivo tras las elecciones generales.
2. Vamos a ver . Se abre un nuevo ciclo político como lo ha llamado Alberto Núñez Feijóo, presidente del PP y candidato favorito a la Presidencia del Gobierno español, en España. ¿En qué podría afectar todo eso a Marruecos?
Recordemos que este tsunami electoral que ha desencadenado un proceso de cambio radical en la política española, tuvo lugar un año después de establecer la hoja de ruta entre España y Marruecos, abriendo una nueva etapa en la relación entre ambos países, basada en la confianza mutua y una cooperación bilateral más sólida. Por lo tanto, es evidentemente comprensible que desde la orilla sur del estrecho nos preguntemos, cómo quedará esta relación en la perspectiva de una alternancia gubernamental en el país vecino, qué es lo que va a cambiar en los compromisos de la hoja de ruta y en qué sentido.
3. ¿Y qué es lo que haya cambiado tras las autonómicas y municipales, y qué se cambiaría al final de las elecciones generales?
Yo creo que estas elecciones, a pesar de su carácter, local han logrado quizás por la primera vez, llamar la atención de la opinión publica marroquí, que ha podido seguir sus noticias a través de los medios de comunicación de España, así como de Marruecos, y eso por diferentes razones que a mi parecer conciernen dos principales cuestiones de carácter estratégico que son el Sahara marroquí y la comunidad marroquí en España.
Cabe señalar que el Sahara marroquí es en España una cuestión de opinión pública. Además, España para Marruecos es un actor clave en este conflicto artificial, como antigua potencia colonial, así como miembro del Grupo de Amigos del Sáhara junto con Estados Unidos, Rusia, Francia y el Reino Unido, pero también como uno de los países europeos que apoyan la propuesta de autonomía bajo soberanía marroquí y que, a partir del primero de julio ejercerá por quinta vez la Presidencia del Consejo de la Unión Europea en el segundo semestre de 2023. Es lógico en este nuevo contexto preguntarnos por las razones que podrán asegurarnos de que la integridad territorial de Marruecos ha dejado de ser una cuestión electoral en el país vecino.
4. ¿Cuáles son estas razones?
La primera razón se refiere a la trágica derrota electoral de la extrema izquierda, Podemos cae en todas las comunidades y se convierte en una formación extraparlamentaria, en comunidades claves para su estrategia como la comunidad de Madrid. Los republicanos separatistas de Cataluña ERC sufrieron una fuerte caída al igual que las pequeñas formaciones con las que Yolanda Díaz quiere Sumar en las próximas elecciones generales, solo la coalición independista EH Bildu ha logrado avanzar en el País Vasco.
Se hunde así el espacio a la izquierda del PSOE, dejando la banda del Polisario sin amigos en las instituciones territoriales de España y muy probablemente en las instituciones nacionales tras las elecciones del 23J.
Cabe recordar que apenas unas horas antes de que SM el Rey Mohamed VI reciba el 7 de abril 2022 en Rabat a Pedro Sánchez, Unidas Podemos, ERC y EH Bildu habían impulsado una proposición no de ley para ratificar el apoyo del Congreso a las resoluciones de la ONU y a la misión de Naciones Unidas para el referéndum en el Sahara marroquí. Votando a favor de esta proposición, el PP dejó entender que solo cuestionaba las formas en las que el Ejecutivo había anunciado el apoyo de España a la propuesta de Autonomía del Sahara bajo soberanía marroquí, fundamentalmente por no haber avisado antes al principal partido de la Oposición.
La segunda razón concierne a las estrategias de posicionamiento de los dos partidos principales en España el PSOE y el PP, respecto a la cuestión del Sahara marroquí, el sistema de bipartidismo en sí mismo no representa ningún riesgo para esta cuestión, el problema es esta nueva política de bloques que introduce nuevos socios políticos en el gobierno, que tratan el tema sin comprender su complejidad y sin ningún sentido de Estado.
Conviene señalar en esta línea que los partidos más constantes en su apoyo al polisario son precisamente aquellos que nunca han tenido la responsabilidad del Gobierno estatal, como PCE/IU, Podemos, y la mayoría de partidos nacionalistas.
Paradójicamente, los populares con Aznar, sin haber apoyado al frente Polisario, habían desencadenado la peor crisis con Marruecos desde 1974. Pero hemos de destacar que, desde la crisis de Perejil, los distintos gobiernos españoles, ya sean socialistas o populares, ya no quieren relaciones tensas con Marruecos. La dureza discursiva exhibida hacia Marruecos en los diferentes debates públicos, no parece ir más allá de la tensión propia de la dinámica Gobierno-oposición, además, algunos líderes históricos del PP como Manuel Fraga habían criticado duramente en el pasado al frente Polisario, históricamente el nacionalismo español de derechas, rechazo a la Argelia pro soviética y a un Polisario marxista. Josep Piqué, antiguo ministro de Asuntos Exteriores en el gobierno de Aznar, había declarado que un Estado saharaui no sería solo difícilmente viable, sino que por su fragilidad podría ser un factor de desestabilización adicional a todo lo que sucede ya en el Sahel.
Lo que quiero decir es que la cuestión del Sahara marroquí sigue siendo una cuestión de alta carga política en España. Es un tema que suscita pasiones en la opinión pública, y es constantemente usada para hacer oposición e intentar desgastar al Gobierno. Sin embargo, tanto los populares como los socialistas en el Gobierno han sido más razonables y moderados respecto a la cuestión del Sahara marroquí de lo que fueron antes o después en la oposición.
Por estas consideraciones sería difícil imaginar que, el PP en el poder cambiese de postura con respecto a la cuestión del Sahara marroquí, además dentro de este partido existen sectores en particular empresariales que son favorables al buen entendimiento con Marruecos.
La tercera razón tiene que ver con la subida de VOX que triplica su número de concejales y se expande por España dando la impresión de que los españoles ya no tienen miedo de este partido de extrema derecha y que la vida política llegó a interiorizarlo en su dinámica, estamos hablando del partido ultraderechista que se ha comprometido en su programa electoral a “Fortalecer nuestras fronteras y levantar un muro infranqueable en Ceuta y Melilla”, un partido populista cuyos mensajes xenófobos y discriminatorios constituyen verdaderamente una fuente de preocupación para la comunidad marroquí, que es la más numerosa comunidad extranjera en España, por lo tanto, la subida electoral de este partido racista nos interpela seriamente, no solamente por el poder municipal y autonómica que le han otorgado las elecciones locales, sino porque pudiera ser mañana el socio principal del PP en el gobierno de la nación, un socio difícil para los populares como lo ha sido Podemos para los socialistas.