Rue20 Español/Rabat
Marruecos está experimentando un auge sin precedentes en la llegada de turistas rusos, consolidándose como el destino africano favorito en 2024, superando a competidores tradicionales como Egipto.
Un estudio reciente de la empresa rusa Megafon, difundido por la agencia Interfax, revela un aumento del 60% en la afluencia de visitantes rusos el mes pasado en comparación con el mismo periodo del año anterior.
Este crecimiento explosivo subraya el atractivo de la variada oferta turística marroquí, que combina paisajes impresionantes, un rico patrimonio cultural y una reconocida hospitalidad.
Si bien Egipto mantiene el liderazgo en volumen total de viajes, el rápido ascenso de Marruecos y su potencial de crecimiento lo posicionan como un competidor formidable.
El interés ruso por Marruecos se refleja también en el incremento del 81% en las solicitudes de visado, según datos del periódico ruso Kommersant.
Esta tendencia se enmarca en un cambio más amplio en los patrones de viaje de los rusos, quienes buscan nuevas experiencias en África y Asia, alejándose progresivamente de los destinos europeos tradicionales, particularmente del espacio Schengen.
«La demanda de visados para China ha superado a la del espacio Schengen en más de tres veces. En cuanto a Japón, las solicitudes casi se han triplicado en comparación con 2023», afirma Yulia Lipatova, directora general de Aeroclub; confirmando la creciente diversificación de los destinos elegidos por los turistas rusos.
Expertos de la Unión Rusa de la Industria del Viaje y el Turismo consideran a Marruecos un destino estrella.
La combinación única de modernidad y tradición, las emblemáticas ciudades imperiales, los fascinantes paisajes desérticos y las atractivas costas convierten al país en una opción cada vez más popular.
Marruecos ha dejado de ser una simple escala exótica para convertirse en un destino turístico de primer orden, capaz de competir con los gigantes del sector.
Esta tendencia emergente promete reconfigurar el mapa de preferencias de los viajeros rusos y consolidar a Marruecos como un actor clave en el panorama turístico internacional.
