Rue20 Español/El Aaiún
En un resonante anuncio, Ghana ha oficializado la suspensión de sus relaciones con la autoproclamada “rasd”. Esta decisión marca un hito crucial en el expediente del Sáhara marroquí, reforzando la posición de Marruecos y consolidando su influencia diplomática en África y más allá.
La decisión de las nuevas autoridades ghanesas de romper con el Polisario constituye una nueva victoria diplomática para Marruecos en el dossier del Sáhara marroquí.
Esto puede ser considerado como un gesto diplomático importante que refuerza la posición de Marruecos sobre el dossier de su Sáhara, un apoyo incondicional a la soberanía del Reino sobre sus provincias del Sur.
Esta decisión fue oficializada en un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores e Integración Regional de Ghana, dirigido al Ministro de Asuntos Exteriores, Cooperación Africana y Marroquíes Residentes en el Extranjero, Nasser Bourita.
El momento de este anuncio es particularmente significativo, ya que se produce a pocas horas de la toma de posesión del nuevo presidente de Ghana, John Dramani Mahama, prevista para este martes 7 de enero en Accra, la capital ghanesa.
Este acto diplomático subraya el compromiso de Ghana de alinear su política exterior con los principios del derecho internacional y de apoyar la búsqueda de una solución duradera a la cuestión del Sáhara marroquí.
El gobierno de Ghana ha comunicado formalmente su decisión a través de los canales diplomáticos, enviando notificaciones al Reino de Marruecos, a la Unión Africana (UA) y a las Naciones Unidas, al tiempo que reitera su apoyo a los esfuerzos de Marruecos para lograr una solución política global, justa y duradera.
Este apoyo a las iniciativas marroquíes es un reconocimiento explícito de las iniciativas emprendidas por el Reino, en particular bajo el impulso de SM el Rey Mohammed VI, quien, desde principios de la década de 2000, ha sabido inscribir la cuestión del Sáhara marroquí en una dinámica de diplomacia proactiva y multilateral.
Ghana no es el primero en adoptar esta posición. En efecto, desde el advenimiento de las reformas emprendidas por Marruecos en la gestión del dossier de su Sáhara, varios países, tanto africanos como internacionales, han optado por romper o suspender sus relaciones con la autoproclamada «rasd».
Hasta la fecha, 46 países, de los cuales 13 en África, han seguido el ejemplo y han puesto fin a cualquier reconocimiento oficial de la «rasd», un movimiento secesionista apoyado por Argelia y algunos otros países del mundo.
Por lo tanto, la acción de Ghana consolida una tendencia ya bien iniciada, marcada por un reconocimiento casi unánime de la posición marroquí sobre su Sáhara, a pesar de los intentos de la parte separatista de atraer a más países a su causa.
Cabe recordar que en 1979, la República de Ghana fue uno de los primeros países en reconocer la «rasd», un acto que ahora ha borrado, en consonancia con los recientes cambios geopolíticos y las aspiraciones de paz y estabilidad en la región del Magreb y más allá.
Marruecos, con esta nueva victoria diplomática, ve aumentar su influencia en el continente africano y en las organizaciones internacionales.