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El periódico francés Le Monde publicó un informe sobre la «amnistía fiscal» que aprobó el gobierno bajo el nombre de «contribución exculpatoria».
Según el informe, esta importante medida del gobierno de Akhannouch ha contribuido a unos ingresos fiscales de 100.000 millones de dirhams (9.600 millones de euros), según informes no oficiales difundidos por la prensa marroquí.
El informe de Le Monde señala que la cifra anunciada en la prensa marroquí supera todas las expectativas y se considera récord, ya que es veinte veces superior a la cantidad recaudada en la misma operación en 2020.
Asimismo, indica que la amnistía fiscal en Francia entre 2014 y 2017 permitió regularizar 32.000 millones de euros en cuatro años.
El informe también menciona que se espera que la operación, que afecta a las personas que no declararon sus ingresos y ganancias sujetas a impuestos en Marruecos antes del 1 de enero de 2024, genere al Estado sólo 5.000 millones de dirhams.
Se consideró que la oferta del gobierno era generosa, ya que a cambio de regularizar la situación financiera de las personas que se beneficiaron de la «amnistía fiscal» pagando un impuesto del 5%, tendrían que pagar el 37% si regularizaran su situación en 2025.
El informe explica que esta decisión permitió que «muchos defraudadores fiscales acudieran a los bancos y a las oficinas de impuestos en los últimos días de 2024 para declarar sus ingresos y depósitos».
El Gobierno, según el informe, afirma que esta medida no sólo tiene como objetivo luchar contra la evasión fiscal, sino también regular la economía informal.
El informe indica que los 100.000 millones de dirhams declarados representan una cuarta parte del efectivo en circulación en Marruecos, que el Banco de Marruecos estima en unos 430.000 millones de dirhams.
Según los mismos datos, los depósitos bancarios representan 60.000 millones de dirhams, mientras que el resto se encuentra en forma de bienes raíces o contribuciones a cuentas de socios.
Se menciona que hay unas 10.000 declaraciones espontáneas que representan el 40% del importe total de las declaraciones, es decir, una media de 4 millones de dirhams por declarante.
Según el informe, fuentes han revelado que una persona regularizó un importe de 280 millones de dirhams, que es el importe más alto registrado hasta ahora para una sola declaración.
De acuerdo con los expertos financieros que hablaron con Le Monde, la cifra récord que ha registrado esta operación refleja una acumulación de efectivo que comenzó en 2020 y coincidió especialmente con la recepción de ayudas, en su mayoría en efectivo, de las que se beneficiaron más de 4 millones de personas.
A esto se añade la aplicación del sistema de contribución profesional individual a partir de 2021, un nuevo sistema fiscal que ha llevado a muchos comerciantes, que no están sujetos al impuesto de retención y que son los principales usuarios del efectivo, a mejorar sus depósitos en el banco.