Rue20 Español/Rabat
Desde el 1 de enero de 2025, cinco nuevos miembros no permanentes han iniciado su mandato de dos años en el Consejo de Seguridad de la ONU: Dinamarca, Grecia, Pakistán, Somalia y Panamá. Estos países, en su mayoría, comparten posturas alineadas con Marruecos respecto a la cuestión del Sahara, consolidando un respaldo internacional creciente a la propuesta de autonomía marroquí.
Somalia, Pakistán y Panamá ya reconocen la marroquinidad del Sahara. En noviembre, el país caribeño destacó al suspender sus relaciones con la autoproclamada «RASD», marcando un claro distanciamiento de las posiciones pro-Polisario. Por otro lado, aunque Grecia aún no reconoce oficialmente la soberanía marroquí, apoya firmemente el plan de autonomía como una solución seria y creíble. Así lo declaró Nikos Dendias, entonces ministro griego de Relaciones Exteriores, en Rabat en enero de 2020, subrayando la viabilidad de la propuesta marroquí en el marco de la ONU.
Dinamarca, por su parte, reiteró en septiembre de 2024 su respaldo a esta iniciativa. En un comunicado conjunto, reconoció el plan de autonomía presentado por Marruecos en 2007 como una base sólida para una solución acordada entre las partes. Estas posiciones refuerzan la presencia de aliados estratégicos para Marruecos dentro del Consejo.
En contraste, el Polisario pierde a Mozambique, cuyo mandato concluyó el 31 de diciembre de 2024. Este país, que reconoce a la «RASD», mostró signos de distanciamiento al abstenerse en la última votación del Consejo sobre el Sahara, celebrada el 31 de octubre. Sin embargo, Argelia, fiel defensora del Polisario, continuará como miembro del Consejo hasta finales de 2025, asegurando un respaldo limitado pero persistente.
Actualmente, el Consejo de Seguridad cuenta con cinco miembros permanentes y no permanentes que apoyan explícitamente la marroquinidad del Sahara: Estados Unidos, Francia, Guyana, Sierra Leona y ahora Panamá. Este panorama subraya un cambio significativo en el equilibrio diplomático, donde Marruecos fortalece su posición gracias a un apoyo internacional cada vez más amplio y a su enfoque constructivo en la resolución del expediente del Sahara.
