Rue20 Español/Rabat
El fútbol marroquí ha vivido un año 2024 histórico, marcado por hitos deportivos y la consolidación del Reino como un referente del fútbol africano e internacional.
Desde la designación como sede del Mundial 2030 hasta el bronce olímpico de la Sub-23, pasando por el dominio continental en Fútsal, Marruecos ha brillado en todos los frentes.
La noticia más impactante del año fue, sin duda, la confirmación de Marruecos, junto a España y Portugal, como sede de la Copa del Mundo de 2030.
Tras varios intentos, el sueño se hizo realidad, impulsando la construcción del imponente Gran Estadio Hassan II en Benslimán, con aforo para 115.000 espectadores, y el desarrollo de infraestructuras complementarias para el evento.
El fútbol sala también aportó alegrías, con la selección nacional conquistando su tercera Copa Africana de Naciones consecutiva.
El torneo, celebrado en Marruecos del 11 al 21 de abril, vio a los jugadores marroquíes arrasar con los premios individuales: Mejor Jugador (Bilal Bakkali), Mejor Goleador (Soufian Charraoui) y Mejor Portero (Abdelkrim Anbia).
Su destacada participación en el Mundial de Uzbekistán, alcanzando los cuartos de final, consolidó su posición entre las potencias mundiales de la disciplina.
En los Juegos Olímpicos de París 2024, la selección Sub-23, capitaneada por Achraf Hakimi y dirigida por Tarik Sektioui, hizo historia al colgarse la medalla de bronce.
Un logro sin precedentes que quedará grabado en la memoria del deporte marroquí, con Soufiane Rahimi brillando como máximo goleador del torneo con ocho tantos.
A pesar de una decepcionante actuación en la Copa Africana de Naciones, donde cayeron en octavos de final ante Sudáfrica, los Leones del Atlas se redimieron con un pleno de victorias en las eliminatorias para la CAN 2025, demostrando su capacidad de recuperación y su ambición de cara al futuro.
Con figuras como Brahim Diaz, Eliesse Ben Seghir y el liderazgo de Achraf Hakimi, el equipo nacional se proyecta con optimismo, reforzado por la llegada de jóvenes talentos que prometen enriquecer la plantilla de Walid Regragui.
El broche de oro a este año excepcional lo puso la designación de Rabat como sede de la oficina de la FIFA en África, un reconocimiento a la capacidad organizativa y la infraestructura del país.
Esta oficina, dedicada al desarrollo del fútbol en el continente, fue inaugurada el 16 de diciembre por Gianni Infantino, presidente de la FIFA, quien destacó el potencial de Marruecos en este ámbito.
La misma noche, Marrakech acogió con éxito la gala de los CAF Awards 2024, confirmando la capacidad del Reino para albergar eventos de gran envergadura.
Además, Marruecos se ha consolidado como un anfitrión solidario al acoger numerosos partidos de selecciones africanas que no pudieron jugar en sus países.
En definitiva, 2024 ha sido un año de ensueño para el fútbol marroquí, lleno de éxitos y reconocimientos que proyectan un futuro brillante para el deporte rey en el Reino.