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El rey Felipe VI de España hizo un llamado el martes a «sacar las lecciones necesarias» para «crecer» después de las mortíferas inundaciones que azotaron el sureste del país en octubre, durante su tradicional discurso de Navidad.
«La catástrofe es un hecho difícil de asumir, pero del que todos deberíamos poder sacar las lecciones necesarias para fortalecernos como sociedad y hacernos crecer», dijo el monarca de 56 años, en su alocución pronunciada en el Palacio Real de Madrid y difundida por televisión en la noche.
Las trágicas inundaciones del 29 de octubre dejaron un saldo de 231 muertos, según el último balance de las autoridades, de los cuales 223 se registraron en la región de Valencia. Cuatro personas aún permanecen desaparecidas, casi dos meses después del siniestro.
El rey de España Felipe VI, la reina Letizia y sus dos hijas realizaron, dos días antes de la Nochebuena, una visita sorpresa a una ciudad devastada por las inundaciones, en la periferia sur de Valencia.
Esta salida real se desarrolló con serenidad, a diferencia de una primera visita accidentada el 3 de noviembre, cinco días después de la tragedia, en compañía del jefe del gobierno Pedro Sánchez y del presidente de la región de Valencia, Carlos Mazón.
Esa visita estuvo marcada por abucheos y lanzamiento de barro, que obligaron a Sánchez y luego a Mazón a abandonar el lugar. La pareja real se quedó en el sitio, con la ropa manchada de barro, pero acortó su visita.
«Hemos visto —y comprendido— la frustración, el dolor, la impaciencia, las demandas de una mayor y más eficaz coordinación de las administraciones», declaró Felipe VI, en alusión a estos incidentes.
También mencionó en su discurso el clima nocivo que reina en la clase política española y lanzó un mensaje de apaciguamiento.
«Es necesario que el conflicto político, legítimo pero a veces ensordecedor, no nos impida escuchar una reivindicación aún más resonante: una exigencia de serenidad», afirmó.
Felipe VI se refirió extensamente al tema de la inmigración, en un momento en que cobra importancia en el debate político español.
«Siendo una realidad cotidiana, las migraciones pueden conducir —sin una gestión adecuada— a tensiones que erosionan la cohesión social», estimó el monarca.
El año 2024 marca los diez años de la llegada al trono de Felipe VI, tras la abdicación de su padre, Juan Carlos I, debido a escándalos en torno a su fortuna.