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Meryem Ghoua
Por segundo año consecutivo, el internacional marroquí, Achraf Hakimi, figura en la lista de los candidatos al Balón de Oro africano, una distinción que echa de menos el fútbol marroquí y no obtenida desde 1998, cuando Mustapha Hadji fue coronado.
Con este nombramiento, el León del Atlas aspira a conservar este prestigioso trofeo en Marruecos y marcar una nueva página en la historia del fútbol nacional, uniéndose a los grandes de este continente.
Capitán de los Leones del Atlas y pilar del Paris Saint-Germain, Achraf Hakimi encarna mucho más que un jugador con estadísticas impresionantes. El número 2 representa la excelencia, la perseverancia y la ambición, convirtiéndose en fuente de inspiración para una nueva generación llena de talento.
Si Hakimi triunfara, se convertiría en el quinto jugador marroquí en ganar este premio, después de Ahmed Faras en 1975, Mohamed Timoumi en 1985, Badou Ezaki al año siguiente y Mustapha Hadji en 1998. También podría convertirse en el primer jugador del PSG en ganarlo.
Una evolución constante:
Su carrera comenzó en el Real Madrid a las órdenes de Zinédine Zidane. Sin embargo, Achraf Hakimi no pudo revelar allí todo su potencial. Utilizado esporádicamente, Hakimi demostró con loserengues su talento en algunos partidos disputados, asistencias y su gol profesional ante el Sevilla FC. Cedido al Borussia Dortmund entre 2018 y 2020, se consagró como uno de los mejores laterales de su generación. En 73 partidos, marcó 12 goles y dio 17 asistencias, en todas las competiciones.
Este próspero periodo le valió el título de mejor jugador joven en los Premios CAF de 2018, reconociendo su potencial excepcional.
En el Inter de Milán, consolidó su estatus de estrella en ascenso al ganar el Scudetto en la temporada 2020-21. Con 45 partidos disputados con la camiseta nerazzurri, 7 goles y 11 asistencias en todas las competiciones, Hakimi dejó una huella imborrable durante su paso por el club italiano.
Nima Tavallaey, cofundador del Italian Football Podcast, recuerda con entusiasmo la etapa del marroquí: “Cuando el Inter fichó a Hakimi, todo el mundo estaba muy emocionado. Ya sabíamos que estaba destinado a convertirse en uno de los mejores laterales del mundo. Con Conte no sólo mostró sus cualidades técnicas y físicas, sino también una increíble fuerza mental. Porque Conte, en general, es alguien muy difícil de gestionar».
Nima añade: “Recuerdo un momento en el que Conte lo despidió porque no había respetado ciertas instrucciones tácticas, especialmente defensivas. Pero Hakimi tuvo paciencia, trabajó duro y cuando regresó marcó. El propio Conte dijo que Hakimi tenía que aprender, y eso es exactamente lo que hizo. Después de eso, el Inter despegó».
Para Nima Tavallaey, Hakimi sigue siendo un jugador excepcional que hizo historia en el Inter: “Francamente, después de la era Maicon, es, con diferencia, el mejor lateral ofensivo que hemos tenido. Es una pena que sólo haya jugado una temporada con nosotros. Los aficionados del Inter todavía lo adoran y lo consideran el lateral moderno perfecto: rápido, técnico, ambidiestro, con una excelente calidad en los centros y una increíble capacidad de regate. Hakimi se lo devuelve. En 2023, viajó feliz a Milán para ver a su Inter ganar el derbi y clasificarse para la final de la Liga de Campeones».
Una temporada brillante con el PSG
Es en el PSG donde Hakimi muestra todo su talento. Con el club capitalino la temporada pasada (2023-24), el lateral derecho de 26 años fue un jugador clave en el éxito del Paris Saint-Germain, ganando la Ligue 1, la Copa de Francia y el Trofeo de Campeones. Con un total de 3.237 minutos jugados, o alrededor de cuarenta partidos jugados, en todas las competiciones, Hakimi anotó 5 goles y proporcionó 7 asistencias. Estas notables actuaciones demuestran su influencia tanto en ataque como en defensa.
“Bajo las órdenes de Luis Enrique, Hakimi se beneficia de total libertad a nivel ofensivo, lo que no era necesariamente el caso antes con Pochettino y Galtier”, analiza Adrien Chantegrelet, periodista de Le Parisien y especialista del PSG.
“En el sistema actual casi se le considera un delantero. En la Liga de Campeones, a veces es incluso el jugador más peligroso ofensivamente… La complicidad con Ousmane Dembélé en el carril derecho refuerza aún más su influencia en el fútbol parisino», agregó.
Esta libertad le permitió brillar la pasada temporada siendo decisivo en varias ocasiones y ganando tres títulos. Su regularidad y su trabajo también le permitieron verse recompensado con una plaza en el once de la temporada en el campeonato francés.
También es impresionante su actual inicio de temporada con los parisinos. En 18 partidos, Achraf Hakimi ya ha marcado 3 goles y ha ofrecido 6 asistencias, además de llevar el brazalete de capitán durante varios partidos de esta mitad de temporada. Esta responsabilidad demuestra la confianza depositada en él por su entrenador Luis Enrique y sus compañeros.
Un líder entre los Leones del Atlas
Desde su primera aparición en octubre de 2016 en la era Hervé Renard, Achraf Hakimi ha seguido demostrando su amor por la camiseta y su apego a la selección marroquí. Desde el principio supo consolidarse como un líder, un jugador dedicado, dispuesto a darlo todo por su país. Incluso después de la llegada de Vahid Halilhodžić, Hakimi mantuvo su puesto titular, demostrando que era un elemento esencial del sistema de Marruecos.
Su condición de directivo no ha decaído y, hoy, bajo la dirección de Walid Regragui, sigue brillando como nunca. Con 82 apariciones con la selección nacional, Hakimi anotó 10 goles y brindó 12 asistencias, un récord impresionante para un lateral derecho que comenzó su carrera a una edad bastante joven.
El capitán de los Leones jugó un papel central durante las eliminatorias para la CAN 2025 y los primeros partidos de las eliminatorias para el Mundial de 2026. En 14 partidos, Hakimi anotó 2 goles y dio 3 asistencias, además de llevar el brazalete de capitán en cinco ocasiones; prueba de su posición de liderazgo en el equipo.
Un ejemplo para las generaciones venideras
El verano pasado, Hakimi alcanzó una nueva dimensión. Hakimi dejó su huella en la selección olímpica marroquí, contribuyendo activamente a la obtención de la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de París 2024. En 6 partidos, marcó 2 goles y confirmó su condición de verdadero pilar tanto en el campo como en el vestuario. Como señal de su liderazgo, el primer gol marroquí en el torneo llegó con una asistencia de Hakimi. El último, marcó de tiro libre, cerrando el festival por 6-0 ante Egipto.
Más allá de los números, Achraf Hakimi se ha convertido en un modelo para los jóvenes jugadores marroquíes. Su ética de trabajo, resiliencia y compromiso con el campo ilustran a la perfección los valores que defiende. Ya sea bajo los colores del PSG o de la selección nacional, sigue superando sus límites, buscando escribir una nueva página en la historia del fútbol marroquí y africano.
En los albores de los Premios CAF, que tendrán lugar dentro de unas horas, Achraf Hakimi tiene grandes ambiciones, que muchos consideran legítimas. Una consagración no sólo le permitiría seguir los pasos de leyendas como Faras, Timoumi y Hadji, sino también reforzar la posición de Marruecos entre las naciones más influyentes del fútbol africano, a la espera de otro trofeo. El de la CAN-2025.