Rue20 Español/Rabat
Bajo el impulso de Su Majestad el Rey Mohammed VI, Marruecos transforma la Agencia Nacional de Regulación de la Energía (ANRE) en un actor estratégico de primer orden, impulsor de una transición energética visionaria, subrayó Khaled Hamadé, presidente del Instituto Internacional de Estudios Geopolíticos, con sede en Montpellier.
Con sus nuevas atribuciones, la ANRE se convertirá en el “gendarme” multi-energético del país, abarcando las energías renovables, el gas natural y el hidrógeno verde, dijo, señalando que “esta reforma visionaria y oportuna posiciona a Marruecos como un modelo en términos de soberanía energética y competitividad”.
Para el geopolitólogo franco-libanés, “el refuerzo de la ANRE no es sólo un avance técnico, es un proyecto nacional inclusivo que protege los intereses de todos y garantiza una regulación transparente y eficaz para apoyar el desarrollo de sectores estratégicos y atraer inversores locales e internacionales”.
Esta reforma, explicó, “llega en el momento justo en un mundo marcado por grandes crisis energéticas y geopolíticas”, porque refuerza la resiliencia de Marruecos y ofrece una plataforma federadora más allá de sus fronteras a escala regional y mundial en materia de transición energética.
“Con una ANRE reforzada, Marruecos sigue demostrando que la transición energética puede ser una palanca de desarrollo y de paz a escala mundial”, añadió.