Rue20 Español/ Fez
Walid El Moumen
Desde las elecciones legislativas celebradas el pasado verano, Francia está viviendo un caos político, especialmente tras la caída del gobierno de Michel Barnier, que llevaba menos de tres meses en el poder.
Esta caída se debe a la censura del Parlamento francés, que derrumbó la formación de Barnier a causa de una controvertida «presupuestación de austeridad», la cual surgió de la aplicación del artículo 49.3 de la Constitución para aprobar el presupuesto de 2025 sin votación parlamentaria.
De este modo, la oposición unificó sus líneas y promovió la censura, con la que logró derribar al gobierno en minoría.
De momento, el país galo está abierto a diversas posibilidades, encabezadas por un posible nombramiento rápido de un nuevo primer ministro antes del sábado, consolidado por un discurso de Macron donde aborda y aclara esta crisis que está atando las manos de su país.
Más allá de lo mencionado, existen otras opciones, aunque quedan descartadas, como la dimisión del propio Macron y la convocatoria de elecciones presidenciales anticipadas, o la reasignación del mismo primer ministro con un nuevo gabinete, tras negociaciones políticas.
